EL Cádiz se impuso al Málaga por 1-0 en su partido de presentación, con apuros. Fue como en otros tiempos, cuando jugaba en las vísperas del Trofeo, en la copa que patrocinaba Cruzcampo. Estos partidos amistosos no suelen revelar las intenciones de los entrenadores. Pero el sábado en Carranza quedaron algunas cosas claras. Faltan refuerzos importantes, sobre todo para el ataque y los extremos, incluso para el lateral izquierdo. Y sobran varios jugadores. La alineación inicial se podría asemejar bastante a la que inicie la Liga el próximo domingo ante la Ponferradina. Ya se sabe que Álvaro Cervera no es partidario de incluir, de inmediato, a los recién llegados.

En la convocatoria quedó muy claro que el entrenador no quiere para nada a Brian, Romera, Lekic ni Perea. También que le sobran dos centrales, y que van a prescindir de Kecojevic, y quizá de Marcos Mauro, que la temporada pasada eran los titulares hasta que llegó Sergio Sánchez. Otra curiosidad a anotar es que David Gil comenzó como titular, por lo que parece que se prepara el relevo en la portería.

También se pudieron ver otros detalles ilustrativos. Entre ellos que Cervera va a colocar a Álex como mediapunta, en cierto modo en las funciones de Aketxe. A día de hoy el Cádiz tiene un único delantero fiable, que es Caye Quintana. Vivió lo que se considera el debú soñado: presentación ante su público y gol. El ariete procedente del Recre quizá no sea el titular, sobre todo si llega Juan Muñoz, pero hay que tenerlo en cuenta. Al menos, más que a Querol, que es una emergencia en esa posición y sigue sin demasiada puntería.

Otro aspecto reseñable es que Bodiger parte como pareja preferida junto a Garrido para cerrar los caminos al ataque rival. Puede que tampoco sea casualidad la alineación de Fali y Cala como centrales titulares. A Iza Carcelén lo podremos ver de lateral o de extremo, como el sábado. Esa fórmula ya la ensayó la pasada temporada con Carmona, aunque no le convencía. Carcelén es un lateral bastante ofensivo, que envió un buen pase de gol a Caye Quintana. Para que jugara de extremo, puso de lateral a Moi, que es central. Y, por cierto, puede que sea mejor que algunos de la primera plantilla.

 Otro del filial, Javi Navarro, tuvo su oportunidad por la falta de extremos y las ausencias forzadas. Y con tal de que no jugara Brian, le dio unos minutitos a Franco, un lateral zurdo que la temporada pasada fue suplente en el Cádiz B.

En estos partidos, el resultado es lo de menos. El Málaga pudo empatar en los últimos minutos, cuando el Cádiz estaba con uno menos por la expulsión de José Mari, que este año no va a ser tan imprescindible, según parece, excepto que se esmere más.

Los últimos minutos fueron de agobio, con un poco de suerte, y recordaron lo que bastantes veces ocurre en Liga, cuando el equipo se va a la cueva, a defenderse, en plan de hombres primitivos, para proteger al portero. Eso debe formar parte del ensayo y los automatismos, de los que tanto se habla. En líneas generales, el automatismo defensivo es muy previsible.

Después del ensayo, a ver si activan las gestiones para que la provisionalidad no condicione demasiado el principio de la temporada.

José Joaquín León