POR falta de golfos en Cádiz no será, pensaréis algunos. Pero eso no justifica esta barbaridad, añado. A Cádiz siempre le intentan quitar todo lo que tiene. Y nunca se sabe por dónde atracan los enemigos. Ni si son franceses, o ingleses, o qué. Ahora, por lo que se ha sabido, son de la Unión Europea. Resulta que le quieren quitar la denominación de Golfo de Cádiz al Golfo de Cádiz. Para sustituirlo por Aguas Portuguesas. Al menos es lo que ha ocurrido con la traducción oficial de las zonas, subzonas y divisiones de la UE en el ámbito pesquero. Por la misma cara y sin avisar, por el procedimiento del descuido, nos han robado el Golfo de Cádiz. Y aquí, sin enterarse, discutiendo lo de siempre.

Lo ha alertado la Federación Andaluza de Cofradías de Pescadores, y han protestado en Huelva, por solidaridad andaluza. Josefa González Bayo, una diputada onubense del PSOE, ha registrado una pregunta en la que indica: “La denominación del Golfo de Cádiz como Aguas Portuguesas no es adecuada porque confunde al consumidor y es perjudicial para Huelva y también para Cádiz”. Digo yo que hubiera sido mejor que esa pregunta la hubieran presentado todos los diputados gaditanos, que para eso van a Madrid; y algunos no sabemos ni quiénes son, y no hacen ni la hueva frita, ni defienden al Golfo de Cádiz y su pesca.

Precisamente hoy han convocado en el salón de plenos del Ayuntamiento un acto sobre el Meridiano de Cádiz, con la presentación del estudio realizado por Miguel Ramos Grosso. Ya escribí otro artículo sobre el Meridiano, que también lo perdimos, y cayó en el olvido. Por el contrario, los ingleses tienen el Meridiano de Greenwich y nos lo tragamos, como nos tragamos que se quedaran con el Peñón de Gibraltar, y ahora parece que ha sido suyo de toda la vida.

El Golfo de Cádiz comprende, precisamente, desde el Cabo de San Vicente portugués hasta el Estrecho de Gibraltar español. Es decir, el arco marino de la costa del Algarve y de Andalucía occidental. El Golfo de Cádiz es muy rico por su cuna, que es de Tartessos y los fenicios, y de las carabelas que se iban para América. Ahora está un poco desmejorado. Aún así, el Golfo de Cádiz es nuestro, y hasta ahí podíamos llegar.

Intolerable resulta que las instituciones de Cádiz no se movilicen ante esta afrenta. Pregunto lo de siempre: si Madrid, Barcelona o Sevilla dispusieran de un Golfo suyo, ¿se lo iban a quitar? No tendrían lo que usted se imagina. Pero esto es Cádiz y aquí hay que mangar. Siempre roban a los pobres, sobre todo si esos pobres son despistados.

José Joaquín León