LOS políticos españoles están teniendo un montón de problemas con sus estudios. Y lo peor es que les pasa como a algunos casados, que no se enteran de quién le pone los cuernos, que puede ser de su mismo partido o de otro. No te puedes fiar ni del jefe: son como corderos degollados, que lo mismo te elogian como que te dan una puñalaíta en la espalda, sólo tres horas después. A este paso comprendo que dimitan: dos ministros han caído. A los que se debe añadir una directora general, que le salvó la cabeza a otra ministra, en el caso de las trabajadoras sexuales. Sin olvidar a nuestra ministra de Defensa, que ha vinculado su futuro al de las corbetas. Algunos dicen que es un Gobierno ejemplar, porque si tienen que dimitir, pues dimiten. Como si los ministros estuvieran ahí para dimitir, en vez de para gobernar.

En esas aparece Albert Rivera, y pide que Pedro Sánchez presente su tesis doctoral. Visto lo visto, presupondrá que también ha fusilado a Wikipedia. Y, además, que no todo el mundo tiene tanta erudición como los titulados en Ciencias Políticas por la Complutense. En esa Universidad estudié yo, incluso yendo a clases y exámenes. Era compañero de Pedro Piqueras. Conservo varios trabajos de la época, cuando todavía no existía Wikipedia, pero sí la enciclopedia de Espasa. Los tiempos han cambiado desde aquella Transición. Antonio Muñoz Molina escribió Todo lo que era sólido. Y ahora parece que todo es líquido, o gaseoso.

Puestos a enseñar, todo el mundo debería mostrar lo suyo. Por ejemplo, ¿en Cádiz no hay nada más que enseñar, aparte de la tesis doctoral de Ignacio Romaní? Al PP le reprocharon eso, aunque luego el caso derivó por los pagos. Con los demás, parece que todo sigue en orden. El alcalde González también haría sus trabajos en la Facultad de Filosofía y Letras de la UCA, por donde pasó y se le recuerda en clases. Después, sus enemigos dicen que fue profesor a distancia, mientras ensayaba presencialmente en la comparsa. Juanma Pérez Dorao, el de Ciudadanos, trabaja en el prestigioso bufete Canalejas. Fran González ejerce y cobra en la Diputación. Martín Vila tuvo un cargo en la Junta de Andalucía. Nadie les ha pedido un papel. Tampoco sabemos si algún edil perdió algún punto del carné de conducir.

Las malas lenguas dicen que algún concejal o concejala debería enseñar el certificado de Primaria. En el futuro se debería crear el Máster del Concejal, donde se formen las nuevas hornadas, con rigurosos exámenes, incluyendo la asignatura de Geografía. Porque no sabemos a dónde vamos a llegar.

José Joaquín León