HA sido muy comentado el desayuno de Navidad organizado en la mañana del 25 de diciembre, en el bar de la estación de ferrocarril de Jerez, donde se reunieron Teresa Rodríguez y Antonio Maíllo por parte de Podemos y Unidos, respectivamente, bajo el lema de Adelante Andalucía, con Juan Marín, de Ciudadanos. Eso es lo que dicen algunas referencias. Aunque al lado de Marín, en la foto, se ve a otra señora, que era Elena Sumariva, concejala de Cs en Sanlúcar de Barrameda, precisamente. Es una señora que está asumiendo poder en la estructura regional ciudadana, al igual que la ganó Manuel Buzón, cuñado de Marín, y que forma parte de eso que algunos llaman el clan de la Manzanilla.

Se ha comentado esta reunión por dos motivos: uno, por las ganas de pactar la Mesa del Parlamento que hay que tener para montar un desayuno los Ciudadanos con los de Podemos Unidos el día de Navidad; y otra, la importancia del citado clan de la Manzanilla, que manda en Ciudadanos de Andalucía, y bien que se nota.

En el partido naranja ahora se llevan mejor, porque con los resultados se intuye el poder. Pero por dentro hay sus más y sus menos. Los críticos de la Manzanilla van diciendo que fue en cabeza de lista por Cádiz Sergio Romero, que no por casualidad también es de Sanlúcar; y que Elena Sumariva, antes de llegar al Ayuntamiento sanluqueño, trabajó en la joyería-relojería de Marín. Con lo cual se demostraría que la relojería sanluqueña de Marín significa en Ciudadanos lo mismo que la tortilla campera en el PSOE de Andalucía. Allí empezó todo.

Hay que estar en el sitio oportuno en el momento justo. El día de Navidad por la mañana, el sitio oportuno era la estación de ferrocarril de Jerez, donde probablemente no esperaban ser descubiertos por The Cádiz Post. Cuando no quieren que los vean, los políticos suelen quedar en cafeterías de hoteles o en estaciones. Pero al final siempre hay alguien que se entera. Sucede igual que con las infidelidades.

Dice Marín que estaban negociando representación para todos en la Mesa del Parlamento. Como se reunió con la extrema izquierda de Podemos, ayer habló con la extrema derecha de Vox, y también con el PSOE. Con el PP no le hizo falta, porque ya tienen todo hablado para lo que de verdad importa. Los partidos hablan, sobre todo a la hora de repartir. En la Mesa del Parlamento de Andalucía todos los partidos quieren un cubierto. No se van a quedar mirando, mientras los otros se ponen morados.

José Joaquín León