NO sé si hemos llegado al pico, como dice el coordinador de Emergencias, Fernando Simón, pero parece el Everest cuando vemos las estadísticas de los muertos. Ya vamos por 6.528 en España. Sin embargo, también hay que decir que no afecta igual a todas las comunidades autónomas. Ya se sabe que el 70% de los fallecidos corresponden a Madrid y a Cataluña. En Andalucía han muerto 207 personas, que es apenas el 3,17% de las víctimas, cuando es la comunidad más habitada de España. Los datos andaluces son buenos y los de la provincia de Cádiz aún mejores. No se puede cantar victoria, pero hay que destacarlo: el esfuerzo de los gaditanos funciona. Al menos hasta ahora.

Según los datos recientes, Cádiz (la tercera provincia andaluza en población, por detrás de Sevilla y Málaga) es la segunda con menos fallecidos, apenas 9, que sólo son mejorados por los 4 de Huelva. Aunque no sabemos lo que ocurrirá al final, en Andalucía en general, y en Cádiz muy en particular, se está controlando la pandemia bastante mejor que la media española. ¿Por una gestión más eficaz de la Junta de Andalucía? ¿Por nuestros médicos? ¿Por suerte? ¿Porque con las coronavirus que tiran los fanfarrones se hacen las gaditanas tirabuzones? ¿Porque el padre Juan Enrique ha sacado el estandarte de la Virgen de la Palma y fray Pascual le reza todos los días a la Patrona? Puede que influya todo. Y, por supuesto, el sacrificio de los gaditanos.

Cádiz, como el resto de España, estaba desprotegida ante el coronavirus. Aquí tampoco había mascarillas. Este fue uno de los mayores errores cometidos por el Gobierno de Pedro Sánchez y por el coordinador de Emergencias, Fernando Simón. Decir que las mascarillas no hacían falta y que bastaba con lavarse las manos. El Rey de España fue al hospital construido por los militares en Ifema con mascarilla y se la pusieron los ministros ese día, a diferencia de lo que acostumbran. Dijeron que eran innecesarias por un motivo claro: no había.

En Cádiz y la provincia celebraron carnavales el 1 de marzo, y también salió gente a la calle el 8 de marzo. Para la manifestación feminista, para los Jartibles, para actos religiosos de cofradías... Nos salvamos, por poco, de un Cádiz-Rayo Vallecano el 15 de marzo, que hubiera sido de alto riesgo...

Probablemente, los resultados de Cádiz son mejores porque aquí la pandemia tardó más en llegar y el confinamiento ha funcionado con mucha disciplina, a pesar de la fama que tienen los gaditanos. A lo mejor hay que revisar algunos tópicos. Y no confiarse.

José Joaquín León