EN el pleno municipal sobre los alojamientos turísticos pasó lo que era justo y necesario. Como el alcalde Kichi y su grupo de Adelante Cádiz no tienen mayoría absoluta, esta vez fallaron en su intento de aprobar un proyecto que es retrógrado, contrario al sentido común y que dejaría a la ciudad en una posición desfavorable para reactivar el turismo cuando sea posible. Han confundido a la gente, con la demagogia del populismo anticapitalista o lo que sea. Pues no está en juego que la ciudad sea para los vecinos en vez de para los turistas. Ni siquiera se trataba de regular el uso turístico de las viviendas, que depende de la Junta de Andalucía. Pretendía congelar las inversiones en hoteles, edificios de apartamentos turísticos y hospedajes tradicionales. Es decir, impedir proyectos de alojamientos en Cádiz.

En contra de lo que se está diciendo, Cádiz es una de las capitales andaluzas con menos alojamientos turísticos. El problema para los vecinos no es que algunos edificios tengan ese uso, en vez de abandonarse hasta que se queden en ruinas. Por el contrario, gran parte del problema lo causa el Ayuntamiento, que incumple las promesas electorales de Kichi y no ofrece alternativas de viviendas sociales a los jóvenes y las personas con menos recursos. Tampoco existe una política coherente de alquileres. Así el casco antiguo de Cádiz padece una decadencia agravada en los últimos años por la inutilidad de los anticapitalistas y sus colegas.

Es gracioso lo que dijo Kichi para criticar que la oposición del PP, PSOE, Ciudadanos y el no adscrito Villero le tumbaran el proyecto. “Han perdido la oportunidad de ser la vanguardia de Andalucía”, afirmó el alcalde. ¿La vanguardia de Andalucía? Cádiz está a la cola de los principales indicadores económicos, de renta y bienestar social. Aparece a la cabeza del paro, el ingreso mínimo vital y los sin techo. El turismo se ha quedado por los suelos, tras la pandemia, y no parece que sea el mejor momento para rematarlo. ¿De qué van a vivir esos gaditanos? ¿Dónde están sus alternativas?

El populismo se basa en palabrería y engaños, que son desmentidos por la realidad. También en falsos agravios. El problema de Cádiz no es el alojamiento turístico, sino la incapacidad para atraer inversiones. La población disminuye porque los jóvenes emigran ante la falta de alternativas laborales. Tampoco Kichi entrega llaves de viviendas sociales. No estamos a la vanguardia de Andalucía, sino en el furgón de cola. No es por casualidad, ni por mala suerte, sino por hacer lo contrario de lo que conviene.

José Joaquín León