SON alegrías de Cai... o tristezas de Nueva York. Desde que ganó las elecciones, y aparecieron los primeros memes, todo el mundo se arranca por las alegrías de Trump. Como si hubieran vuelto Camarón y Chano Lobato. Del Tiriti tran tran tran hemos pasado al Tiriti Trump Trump Trump. Todavía Tiriti no ha tomado posesión y ya le han organizado manifestaciones de protesta, como a Rajoy en el Congreso de los Diputados. En Cádiz, la cuna de las alegrías, ya está rebautizado en aguas de la Caleta. Los más espabilados se dieron cuenta de que si Donald tuviera el apodo de Tiriti sería Tiriti Trump; o sea Tiriti Trump Trump Trump. Lo único que nos faltaba es que este gachó saliera flamenkito apaleao, como aquella chirigota de Juan Carlos. Aunque allí la apaleada es la otra.

Si ustedes se fijan bien, Donald Trump tiene una cara de chirigotero que no puede con ella. En la chirigota de El Sheriff quedaría clavado. Juan Manuel Braza disfrazado de Tiriti Trump daría el tipo perfectamente, y Donald disfrazado de El Sheriff también. O imaginárselo en una chirigota de El Selu, todos ellos con el tipo de Tiriti Trump Trump Trump, de flamencos de Nueva York, que cambiaron la estatua de la Libertad (bajo fianza) por la estatua de Moret, que es ambulante, como los inmigrantes.

También es verdad que Donald Trump tiene un careto de careta de Carnaval. Con esa cara y con esos pelos rubios (tanto juego que han dado en Cádiz los pelos rubios) este tipo es carne de chirigota callejera, pero también vale para el concurso. Incluso para cuarteto sirve: Las aventuras de Tirititrump, o Juego de Tronos con monos. Raro me resulta que nuestro alcalde Kichi, haciendo valer sus privilegios y potestades, no haya nombrado presidente del jurado del Carnaval a Tiriti Trump. Con permiso de María Romay, por si ella tiene otro candidato peor, pues mejor es imposible.

¿Se acuerdan ustedes de la que se formó cuando Obama iba a visitar Sevilla, y al final se quedó en la Base de Rota? Obama iba a poner a Sevilla en el mapamundi. Pero Tititi Trump Trump Trump ya ha puesto a Cádiz en el mapamundi con su alegría. Por lo menos al Cádiz de Ohio, donde ganó el joío. Este tipo ya había salido en películas de Hollywood, pero debió ser del Hollywood que está al lado del Campo de las Balas.

No sé a qué esperan para invitar a Tiriti Trump. Que visite Cádiz como un crucerista y le den un homenaje en el Centro Flamenco de la Merced, que antes fue el Piojito auténtico. Tiriti Trump ha puesto a las alegrías de Cai en los mapas, y puede conseguir que el Carnaval sea patrimonio de la Humanidad. O de la inhumanidad, ya se verá.

José Joaquín León