PODRÁ gustar o no, pero los del PP tratan al Nuevo Puente de Cádiz con un cariño especial, como si fuera su niño mimado. El delegado del Gobierno en Andalucía y presidente del PP provincial, Antonio Sanz, en una de sus visitas, habló sobre la nueva iluminación, y dijo que va a ser “espectacular”, y la relacionó como un atractivo turístico para la ciudad, y recordó que el Ministerio de Fomento se va a gastar en los trabajos complementarios que faltan 35 millones de euros. Comparados con el fichaje de Neymar son pocos, pero comparados con la Edusi de Cádiz, y lo que montó el alcalde González, resulta que es más del doble.

Por supuesto, en otras circunstancias, esto hubiera sido muy difundido. Esa iluminación extraordinaria, con imágenes maravillosas captadas por drones invisibles, estaría proyectándose a todas horas en las pantallas LED y en otros anuncios diversos. Sin embargo, a los de Podemos les pasa lo contrario. Ven al Nuevo Puente de Cádiz como un niño mimado de Teófila, y les recuerda a su madre (como si fuera rubio), y parece que les da coraje, quizá porque ellos no van a construir nunca un puente, ni iluminan nada, ni la playa de noche, ni siquiera las calles en Navidad, porque eso cuesta un dinero social, y ese rollo que ya sabemos.

Por el contrario, los del PP son unos forofos de Eléctrica de Cádiz, donde Pepe Blas Fernández sigue de presidente de la Fundación, y firma el Bono Eléctrico con Kichi. Fue inexplicable que pusieran el mástil para la bandera en la plaza de Sevilla, en vez de una enorme fuente luminosa, con luces y sonido, mejorando lo de San Juan de Dios. En Cádiz siempre ha gustado una buena luz. Se decía que era la Costa de la Luz.

Según deduzco de lo que explicó Antonio Sanz, vamos a tener una Iluminación Magna en el puente. En Cádiz también gusta mucho todo lo magno. Las iluminaciones sirven para despejar las tinieblas. No sabemos si habrá musiquita con el espectáculo de las luces, como en las puestas de sol. Los colores que van a utilizar, según las pruebas, son rojos, azules, violetas y blancos. Menos los naranjas de Ciudadanos, están todos. De manera que si gana el PP las municipales de 2019, el puente se podrá decorar de azul durante un mes, y si gana Podemos de violeta, y si ocurre un milagro y gana el PSOE lo pueden dejar un año de rojo y que Pedro Sánchez se lance desde lo alto, como si fuera el puente Canal.

Cádiz va a disponer de un nuevo atractivo. A ver si nos enteramos, aunque apaguen las pantallas. El puente es de todos y todas.

José Joaquín León