HA comenzado una campaña de desprestigio contra Susana Díaz, aunque su candidatura a liderar el PSOE todavía no es oficial. Una campaña bastante torpe y muy cutre. Con descubrimientos que mueven a las carcajadas, como que la Junta de Andalucía tiene tropecientos mil empleados públicos y un montón de millones de déficit. Detalles que se sabían desde que era presidente Manuel Chaves. Intentos de pringarla en algo, lo que sea. Recordar las estadísticas de Andalucía, que no está a la cabeza de España en casi nada excepto el número de parados. Logros muy negativos, que incluso no son suyos, en algunos casos. Las campañas en España son una bendición: tan desastrosas y burdas que suelen conseguir el efecto contrario al deseado.

No voy a decir yo que Susana Díaz sea la mejor lideresa que ha parido el PSOE en España. Basta con repasar su curriculum para entender que no la elegirían como presidenta de una gran compañía. Tampoco es una teórica del socialismo comparable con Rosa Luxemburgo, ni es la inventora del Estado del Bienestar. Aunque tampoco los demás líderes españoles han ganado ningún Premio Nobel, puestos a decir virtudes. En nuestra política hay lo que hay, lo que ves. Porque se gana poco dinero; y cuando ganas mucho casi seguro que terminas en la cárcel. No es un oficio de los mejores. Aunque sí de los más influyentes. Así nos va.

A pesar de todos los pesares, Susana Díaz tiene algunas habilidades. Por ejemplo, es la dirigente del PSOE que gobierna en la comunidad más importante de España en número de habitantes. Por ejemplo, a ella no le ha ganado el PP unas elecciones autonómicas todavía. Por ejemplo, a diferencia de otros, no ha necesitado el apoyo de Podemos para nada. Entre otras cuestiones, porque Podemos en Andalucía es menos relevante que en otras zonas de España, gracias a quienes conocen a Teresa Rodríguez. Aparte de que los rivales en las primarias del PSOE son sendas joyitas: Patxi fue lehendakari con los votos del PP (por cierto) y dejó al PSE tocado y hundido; Pedro hundió directamente al PSOE con los peores resultados de su historia, un récord que él mismo pulverizó.

Yo entiendo que el PP, Ciudadanos y Podemos estén deseando que el nuevo líder del PSOE sea Pedro Sánchez (o incluso Patxi López), pues así serán felicísimos, resultará mucho mejor para ellos. De esos tres, si hay alguien que tiene una remota posibilidad de conseguir más votos de centro (que son los que le dan y le quitan los gobiernos al PSOE) esa es Susana Díaz. Todo el mundo lo sabe. Por eso las campañas.

José Joaquín León