EL sueño del PP sevillano es que un día se despiertan y resulta que han ganado las elecciones autonómicas en la provincia. Con tono evangélico, se puede pensar que es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja. En las siete restantes provincias andaluzas tienen más posibilidades. Sobre todo en la Andalucía marinera, que es más pepera. Pero el agro sevillano parece que es la reserva espiritual del Occidente socialista. Y siempre les quedará Dos Hermanas, donde Quico Toscano se ha convertido en un líder del sanchismo, tan cercano como está de Triana, y no digamos de Bellavista, donde comenzó la cosa.

Ahora, con los últimos datos del Egopa, han aparecido muchos comentarios. El PP avanza en la provincia de Sevilla, el PP se aproxima... No tiembla Susana, porque sabe que no hay elecciones en el horizonte inmediato. Cuando sea lideresa nacional (con permiso de Quico Toscano, Odón Elorza y otras bases de los irreductibles sanchistas), se quedará fortalecida. Si no la votan aquí, ¿dónde la van a votar? El Egopa es lo que en música clásica se conoce como un divertimento, al modo de Mozart. Ya llegaran las sinfonías, y no digo nada del Requiem, por no tocar madera.

Este acercamiento del PP en la provincia de Sevilla, según el sondeo del Egopa, hay que valorarlo en su justa medida. Es una deducción a través de 400 encuestas telefónicas. Se supone que han llamado a teléfonos fijos, y que todo el mundo no los tiene ya, y que vete a saber el número que marcaron. No es lo mismo si han llamado a la sede del PP en Tomares que a ciertos teléfonos de Marinaleda, desde donde responderían “Aló, comandante”. Son llamadas aleatorias, que pueden llevar a la confusión. Recuerden lo que pasó con las encuestas de Donald Trump. ¿A quién llamarían en Texas con las egopas de allí?

Por otra parte, y a eso voy, dijo Soraya Sáenz de Santamaría, precisamente, que mientras asistimos al espectáculo de la división en otros partidos, en el PP existe unidad y se trabaja en gobernar, al margen de las divisiones. Ya, ya. Díselo a los tuyos de Sevilla, que ahí están con los otros de la otra. Bueno, que pudo ser un poco más prudente. Sepan todos que por tener o dejar de tener 20 concejales (o bien 19+1 de chiripa) en la capital, eso no implica que ganen en Badolatosa, ni en Coripe, ni tampoco en Dos Hermanas. Por lo cual, cuando se suman los votos, pasa lo que pasa. Esa reserva espiritual, que ahí sigue.

José Joaquín León