DESDE hace unos años se ha extendido el tópico de que la celebración del Corpus Christi está en decadencia. Los sevillanos pasean la noche del miércoles por el centro y el jueves se van a la playa. Puede que esto ocurra con un sector de personas, que coincide básicamente con el público superfluo de la Semana Santa. Es decir, los que no profundizan en la celebración religiosa y se contentan con lo externo. Sin embargo, es falso que en Sevilla no se conmemore el Corpus como lo que es desde siglos pretéritos: la Fiesta Grande de la ciudad. Y también es falso que las hermandades no dediquen a la Eucaristía la alta importancia que se merece.
Este año van a salir en Sevilla 32 procesiones eucarísticas organizadas por hermandades sacramentales (en colaboración con las parroquias, en la mayoría de los casos) en menos de dos meses, desde la dominica in albis (el domingo posterior al de la Resurrección), cuando salió la procesión pascual para enfermos e impedidos del Sagrario, hasta el 2 de junio. El próximo fin de semana, que es la celebración del Corpus, salen en Sevilla 12 procesiones eucarísticas organizadas por sacramentales y sus parroquias. Además de tres o cuatro de parroquias sin hermandades. Tres procesiones han sido adelantadas al sábado (San Isidoro, Padre Pío-Palmete, y Santo Entierro) y nueve salen el domingo (Corpus Chico de Triana, Corpus de la Magdalena, Nervión (La Sed), Tiro de Línea, San Roque, San Román y Santa Catalina, San Bartolomé (Alegría), San José Obrero y Corpus Christi (de la Palmera).
La celebración del Corpus, con la procesión de hoy, alcanza una especial solemnidad. En Fiestas Mayores se lo han tomado con interés. Paquili Carrera ha ejercido como jefe de altares y ha conseguido que se instalen 14, además de las hermandades que colaboran en el exorno de escaparates. En total, 31 entidades. La carrera del Corpus presenta un aspecto muy lucido. Se suman las exposiciones de la Amargura, titulada Non Surrexit, y del Sagrario, titulada Splendor lapidis, en la Fundación Cajasol. Y el traslado extraordinario de la Hiniesta y el ya tradicional de la Cena. Y las dos horas y media que tarda en pasar la procesión del Corpus, en la que salen unos 5.000 cofrades. Además de las representaciones religiosas, cívicas y militares. Es el Corpus más participativo de España.
Por eso, es injusto decir que en Sevilla el Corpus ha ido a menos. Hace medio siglo estuvo a punto de suspenderse. Ahora, por el contrario, las procesiones eucarísticas van a mejor, gracias al esfuerzo de las hermandades y las parroquias. Aunque eso lo saben quiénes las ven, que no suelen ser los que se lamentan.
José Joaquín León