DONDE va la gente, va Vicente. Hubo un tiempo en que Vicente el del Canasto iba por la calle Tetuán esquivando coches. Yo recuerdo una vez que casi lo atropellan en la esquina de la calle Rioja. Ya no pasan coches por Tetuán, aunque se criticó su peatonalización. Con eso se aprecia que las ideas costumbristas cambian con los años. En este puente de la Constitución y la Inmaculada a todo el mundo en general le ha dado por recorrer la calle Tetuán. Y aunque es la milla de oro, no todos compraban, ni miraban, sino que lo suyo era recorrerla, como si no hubiera otra.
Un vehículo de la Policía Local pasó largas horas aparcado, junto a Massimo Dutti, en la esquina de Rioja, donde reviran los pasos trianeros, y donde Vicente el del Canasto jugueteaba con los coches en otros tiempos. De modo que los ambulantes de las falsificaciones de Nike y Adidas se establecieron temporalmente en Sierpes, aprovechando que no hay sillas. Los veladores quedaban por Mateos Gago, que todavía no es peatonal, y se notaba. A un amigo casi lo atropellan allí, entre una moto y una bici, en la calzada sin plataforma. El turista se mueve por una carrera oficial, que también va de la Catedral a la Campana, al derecho y al revés. La turismofobia sigue la ruta de las lucecitas y las bolas.
Viendo estas bullas del puente de la Inmaculada, me entró una duda: ¿se impondrán las calles peatonales de sentido único en Sevilla? Manuela Carmena ya lo aplica en Madrid: Preciados para allá y Carmen para acá. Espadas no es de Participa Sevilla, pero podría organizar otra consulta popular para ver qué le parece a la gente participante. En Semana Santa, el Cecop podría poner Tetuán para acá y Méndez Núñez para allá. Villegas y Cuesta del Rosario en sentido Alfalfa, con Alcaicería y Córdoba en sentido Salvador. ¿Esto sería bueno para las bullas post entrada de la Borriquita?
Se pueden encontrar más parejas de calles: Reyes Católicos y Canalejas; Trajano y Amor de Dios; Francos y Álvarez Quintero... Por si acaso, en este puente hemos visto autorregulación espontánea de bullas en Tetuán y Sierpes; esto es, circulando siempre de frente, y siempre por la derecha, en dirección a la Plaza o a la Campana.
Esta sería la duda del bullicio en tiempos del Gran Hermano Mayor: circular por calles peatonales de sentido único; o circular siempre por la derecha y olvidarse de la izquierda. A ver qué prefiere el Cecop.
José Joaquín León