UN reconocido escritor gaditano, llamado José María Pemán, considerado fascista hoy en día y liberal monárquico cuando lo escribió, publicó en 1970 un libro titulado Mis almuerzos con gente importante. Un reconocido escritor no gaditano (nacido en Barcelona), llamado Manuel Vázquez Montalbán, considerado comunista cuando lo escribió y olvidado por los comunistas de hoy en día, publicó en 1984 un libro titulado Mis almuerzos con gente inquietante. En la España del último tercio del siglo XX, los buenos escritores y periodistas de la derecha y la izquierda, como Pemán y Vázquez Montalbán, además de artículos, podían escribir libros en los que se referían a personas con las que simpatizaban más o menos, pero con las que habían convivido. Además, los almuerzos de antes no eran como los de hoy en día. Y no se anulaban por un quítame allá esos virus.

LA Navidad es el tiempo de los desplazamientos y las ausencias. La Navidad podría ser el motor que moviera al mundo. Todo comenzó en Belén, un pueblo que hoy no podrán visitar los peregrinos, aunque los guíe una Estrella, porque los viajes a Israel vuelven a prohibirse a causa del coronavirus. A Belén viajaron José y María, para unos trámites burocráticos, y allí la sorprendió el parto, con el nacimiento de Jesús. Se cobijaron en un portal, como unos sin techo. Y a los pocos días huyeron a Egipto, como unos refugiados, a cuyo hijo quería matar Herodes. Aquella familia procedía de Nazaret, pero en el día de la verdad se habían desplazado a Belén. Fueron migrantes y refugiados, hasta que pudieron volver a casa.

UNA característica del populismo es el oportunismo. Incluso aprovechar las desgracias en beneficio propio. Es lo que hace Kichi, al defender ahora que fue un acierto aplazar el Carnaval a mayo y junio, porque la evolución de la pandemia lo haría casi imposible en enero y febrero. ¿Hubiera pedido perdón él si la evolución de la pandemia hubiese sido la contraria y hubiéramos llegado a enero y febrero en mejores circunstancias? Al margen de eso, Kichi sigue jugando a aprendiz de Nostradamus. Y es verdad que en enero o febrero hay más posibilidades de pandemia de Covid 19 (y de casos de gripe) que en la primavera avanzada. Pero la cuestión de fondo es que el Carnaval, la Semana Santa, el Corpus, los Juanillos, los Tosantos, la Navidad y todas las fiestas religiosas o laicas deben celebrarse en sus fechas. Y si no se puede, pues se suspenden ese año y se espera al siguiente.

EL 8 de mayo de 2022 se cumplirán 125 años del nacimiento de José María Pemán en Cádiz. En cualquier ciudad se festejaría con importantes actos, para difundir la realidad de su obra, condenada hoy no ya al olvido (pues se habla de él igual que en sus tiempos, o puede que más), sino de la manipulación que se ha forjado alrededor. El alcalde Kichi, en vez de preparar unos actos de homenaje a Pemán, con motivo de esta efeméride, ha propuesto que le retiren el título de Hijo Predilecto de Cádiz. Basta con repasar la lista de quienes tienen ese título de hijos predilectos para opinar al respecto, sin señalar a nadie. Por lo visto no se conforma su odio con quitarle el teatro, la lápida, el monumento, o lo que sea.

UNO de los tópicos más arraigados en Cádiz es el de la pobreza. Se supone que es una de las ciudades más pobres de España, castigada por la vejez de la población, el paro, los desahucios, la escasez y el alto precio de las viviendas, los sin techos, etcétera. Pobres hay los, aunque no son mayoría absoluta. Los datos que publicó recientemente la Agencia Tributaria (datos oficiales, basados en los impuestos) apuntaban que la renta media declarada por los gaditanos en 2019 fue de 29.055 euros al año. Cádiz es el segundo municipio más rico (o menos pobre) de la provincia, después de San Roque. La renta declarada de los gaditanos está por encima de la media de Andalucía (23.510 euros) y también supera la media española (28.384 euros). Es decir, Cádiz, en el conjunto de España, se sitúa en la mitad.