LA gala de las Estrellas Michelín ha sido desastrosa para Sevilla. Unos desagradecidos, que vienen a mesa y mantel, y después le dan los premios a restaurantes forasteros. Para Sevilla fue más importante la gala de los premios de MTV, donde triunfó Rosalía, y sin decir nada contra sus fans de Vox. Y por supuesto, el congreso de las Academias de la Lengua Española, que colocó palabras muy de aquí, como capillita y sieso, en el diccionario. Unos siesos han sido los de la Guía de Michelín, que dejan a Sevilla con una sola estrella, y ninguna en Triana, donde está la verdadera. Una estrella que es la de Abantal, de Julio Fernández, que la tiene desde 2008. Significa que desde hace 11 años, para estos señores, la cocina sevillana no ha avanzado nada.
ALGUNOS socialistas sólo tienen memoria histórica para lo que les conviene. Para pasear a la momia de Franco en helicóptero y cosas así. En Andalucía, en general, y en Sevilla, en particular, casi todos se han vuelto amnésicos. Los pedristas sanchistas, para demostrar que se lavaron las manos como el Pilato de la Macarena, se quieren cargar a Susana Díaz con la excusa de la condena a Pepe Griñán y Manolo Chaves, entre otros. Los pedristas sanchistas deberían saber que María Jesús Montero, ministra de Hacienda, y Juan Espadas, alcalde de Sevilla, a los que se considera sucesores posibles de la señora Díaz, fueron consejeros con Chaves y con Griñán de presidentes. No se enteraron de nada, por supuesto.
LA buena gente pregunta: ¿y qué hubiera pasado si esta sentencia de los ERE se hubiera publicado antes de las elecciones del 10-N? ¿Hubiera sido el PSOE el partido más votado en Andalucía, después de una condena a sus principales líderes de la década pasada a penas de cárcel e inhabilitación, por malversación y prevaricación? La buena gente no entiende los tiempos judiciales, que son como son. La sentencia del proceso independentista de Cataluña salió antes de las elecciones, pero la de los ERE de Andalucía no. El papelón de Pablo Iglesias es muy interesante. A cambio de una vicepresidencia y tres ministerios, el fustigador del bipartidismo corrupto va a subir a los cielos del poder con un partido que tiene nueve condenados a penas de cárcel.
LARGAS colas de atascos, a primeras horas de la mañana, en el acceso a Sevilla desde la autovía A-4 de Cádiz y la SE-30, en las inmediaciones de Palmas Altas y el puente del Centenario. En algunos momentos los atascos llegaron hasta los seis kilómetros de prolongación. Ayer tocaba, porque era lunes. Ya no es noticia, y eso es lo peor. Por el contrario, lo noticioso es el acuerdo alcanzado entre Juan Espadas y Marifrán Carazo para que la línea 3 del Metro llegue hasta Valme y Bellavista algún día. Junta y Ayuntamiento actualizarán el proyecto.
NADIE lo quiere asumir, pero las elecciones tienen una repercusión directa en la creación de empleo y el paro. Pasa en todas: las generales, las autonómicas y las municipales. Podríamos citar varios casos de ilustres miembros del PSOE y del PP que han pasado por todas las administraciones públicas. Lo mismo sirven para un ministerio que para una consejería que para una concejalía. Incluso los hay, como María Jesús Montero, médica de profesión, que tras pasar por Salud (era lo suyo), acabó como consejera de Hacienda con Susana Díaz y después fue fichada como ministra de Hacienda por Pedro Sánchez. Yo no sé si es peor plagiar una tesis o colocar a una médica al frente de la Hacienda. ¿Qué dirían si nombran a un economista como jefe de Ginecología de un hospital sevillano?