RECUERDEN aquel otoño, que fue el pasado, cuando algunos partidos, singularmente Ciudadanos, buscaban desesperadamente a su Manuel Valls sevillano. Unos meses antes, en mayo, en vísperas de la moción de censura, las encuestas decían que el partido más votado sería Ciudadanos, si en ese momento convocaban elecciones en España. Diversos gurús y estrategas de barra de bar sostienen que ese fue el motivo por el que Mariano Rajoy no dimitió para anticipar elecciones generales, cuando Pedro Sánchez le planteó la moción de censura. Rajoy prefirió perder el Gobierno (y que entrara como okupa provisional Pedro  Sánchez) a darle la alegría del sorpasso a Albert Rivera. Por el mismo motivo, Sánchez se atrincheró en la Moncloa, hasta que su gurú le dijo “Ahora, Pedro, ahora”.

ENTRE las campañas de las últimas elecciones municipales en Sevilla, la que ha tenido más mérito es la de Beltrán Pérez. Ya sé que el alcalde Espadas ha conseguido 13 concejales para el PSOE, frente a los 8 con los que se ha quedado el PP. Ya sé que los populares fueron los más votados en 2015, cuando el candidato fue Juan Ignacio Zoido, y que obtuvieron 12 concejales frente a los 11 de Espadas, que llegó a la Alcaldía aupado por los podemitas de Participa y por IU. Pero  recuerden de dónde venía el PP. En 2015 llegaba de gobernar con la mayoría absolutísima de los 20 concejales. Por el contrario, ahora llegaba de un desastre, de un partido al que habían destrozado en Sevilla, entre unos y otros.

EL triunfo electoral de Juan Espadas tiene más valor que el puramente sevillano. Se convierte en uno de los principales activos para el PSOE. Será el único alcalde socialista en las cuatro primeras ciudades españolas. También se convierte en el principal político socialista de Andalucía. Susana Díaz se ha llevado otro disgusto en estas elecciones, sin presentarse, pero es la secretaria general del PSOE-A todavía. Y podría ocurrirle lo mismo de la Junta, con un pacto a la andaluza que daría al PP las alcaldías de Málaga, Almería, Córdoba, Granada y Jaén. En Cádiz se quedará el anticapitalista Kichi, después de otro fracaso del PSOE. Los socialistas sólo gobernarían los ayuntamientos de Sevilla y Huelva.

LOS resultados de las elecciones municipales en Sevilla han confirmado lo esperado: Juan Espadas seguirá como alcalde, pero sin mayoría absoluta. El triunfo ha sido claro. Se podría decir que un éxito transversal, que le ha permitido sumar votos del socialismo, de la izquierda moderada, de una parte del centro y hasta de votantes de derecha a los que aporta confianza. A la hora de pactar, podría apoyarse en Adelante Sevilla, que ha ido a la baja, pero también en Ciudadanos, que tiene la llave de la gobernabilidad con sus cuatro concejales.

HOY se disputa la final de la Copa del Rey en Sevilla. Es un evento más, de los muchos que ha conseguido la ciudad en los últimos tiempos. La final de la Copa del Rey sería como la gala de los premios Goya del fútbol español, ya que la Liga se disputa en 38 jornadas. El estadio Benito Villamarín se vestirá de gala, para el partido entre el Barcelona y el Valencia. En los últimos años, la final de Copa la juegan el Barça de Messi y otro equipo. Esta circunstancia es aprovechada por el sector más indepe de su afición para pitar al Rey, que preside el partido, y también al himno. Lamentablemente, ya forma parte de los ritos. Es un escándalo, que se olvidará a partir del lunes.