CANTABA Lucho Gatica que la distancia es el olvido. Y después lo han cantado muchos más, en diferentes versiones. Pero no hace falta recurrir al bolero para dar el cante.…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
SEVILLA es una ciudad polarizada en lo futbolístico. La rivalidad entre Sevilla y Betis (o a la inversa) se traslada incluso al cartel de la Cabalgata de los Reyes Magos, obra de Fernando Vaquero. En ese contexto, se ha consolidado la tercera vía del fútbol sevillano: el estadio de La…
PARA la diócesis de Cádiz y Ceuta es una buena noticia que uno de los dos obispos auxiliares de Sevilla, Ramón Darío Valdivia Giménez, haya sido nombrado administrador apostólico. Por dos motivos, principalmente. El primero es que por fin la Santa Sede admite la renuncia que el obispo Rafael Zornoza…

TODOS los problemas de Cádiz se resumen en uno: la van a dejar cada vez más pueblerina. Se nota en todo. Piensen en algo y comparen con otras ciudades. No sólo capitales más grandes, donde las diferencias son abrumadoras, sino incluso en municipios de nuestros alrededores. Con el alumbrado de Navidad no hay que bajar la guardia. El proyecto municipal es intolerable y la oposición no puede permitir que las principales calles comerciales de Cádiz se queden a oscuras en las fiestas navideñas. No es por una bombilla de más o de menos, ni por ahorrar, sino porque tienen las ideas confusas.
HA llamado la atención el traslado de sevillanos a Madrid que está haciendo Zoido, pero esto no es nuevo. Tener sevillanos en Madrid siempre ha sido una gran aspiración local. En apariencia un poco catetorra, pues a esos sevillanos de la Corte se les suponen ciertas dotes para influir a favor. Algo así como un lobby del paisanaje. Esto ya funcionaba en el franquismo, donde no voy a incidir. Pero alcanzó unos momentos insuperables en la democracia, a partir de 1982, cuando estaban Felipe González como presidente del Gobierno y Alfonso Guerra como vicepresidente. Dos sevillanos al mando de la nación.
A Felipe González nadie le puede negar que es el político más genial que queda en España. Puede que el único. Como él mismo dijo en el Foro Joly del pasado jueves en Sevilla, le atacan porque es el último superviviente de los que hicieron el pacto que permitió la Transición y la democracia en España. Bueno, pues Felipe remató su actuación, tras una tanda de muletazos adornados, con una estocada hasta la bola, en la que le puso el epitafio político lapidario a Pedro Sánchez: “Lo hizo lo mejor que sabía, aunque no sabía”. Muchos de ustedes verán que esto mismo se le puede aplicar a nuestro alcalde Kichi, aunque él todavía no está en el momento Epitafio (otros sueñan con que ya le falta poco). Y es que nuestro alcalde “hace lo mejor que sabe, aunque no sabe”. Y se le nota.
YA nadie habla de los Clinton, como les decían los maliciosos al alcalde de Cádiz, José María González Santos, y a su compañera, Teresa Rodríguez, líder suprema de Podemos en Andalucía. El mote era ocurrente, pero desajustado a la realidad. A Teresa no le ha pasado como a Hillary, ni ella se ha encontrado con ningún Tiriti Trump por el camino. Por el contrario, en estos días pasados, Teresa ha ido a lo grande, que era afirmarse como la líder de Podemos en Andalucía. Su candidatura se denominaba Por una marea andaluza, y ha ganado como una ola. Ha sido un éxito indiscutible, ya que obtuvo el 75,64 % de los votos emitidos.
UNAS sencillas declaraciones de Susana Díaz (realizadas en una entrevista centrada en qué hay de lo suyo) han provocado efectos colaterales en Cádiz. Al preguntarle por su relación con Podemos, que se sabe que no es idílica, y de lo que ocurrió en Cádiz, Susana expresó algunos pensamientos, que han sido replicados por el alcalde Cádiz, y no precisamente para hacer amigos y amigas en la Junta. Por si fuera poco, ha terciado en la polémica, el delegado de la Junta, Fernando López Gil, que se mete en todo, y ha recordado a Kichi que el cargo de alcalde que ostenta en Cádiz se lo debe al PSOE. Un detalle que todo el mundo conocía, y con el que López Gil no le hace un favor a los suyos, sino que los reconoce como responsables del asunto y del posible desaguisado.