LA globalización nos puede llevar a adoptar los usos y las costumbres de otros países. Es lo que está ocurriendo con las fiestas de Todos los Santos y los Fieles…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
LAS lluvias torrenciales y los vientos provocaron ayer inundaciones y destrozos en Andalucía, sobre todo en las provincias de Sevilla y Huelva. Coincidía la fecha con el aniversario de la dana que causó 229 muertos en Valencia, lo que acentuaba el impacto psicológico. En Sevilla se sabe que las grandes…
ESTE país, quizás el más progresista del mundo (con permiso de Venezuela), es la locomotora económica de Occidente. Tiene la mayor subida del PIB; batimos el récord de empleo y de parados a la vez, y es el único de la OTAN que no puede llegar al 5% en gastos…

LA gente inocente está diciendo que Pedro Sánchez recibió el domingo un voto de castigo. Es así, pero no exactamente así del todo. De momento, el mayor voto de castigo se lo ha dado Pedro Sánchez a los ciudadanos votantes, como represalia, fijando las elecciones el 23 de julio. ¡Anda ahí! ¿Dónde se ha visto eso? En Andalucía está prohibido votar en julio y en agosto para las elecciones autonómicas. Luego dirán que somos vagos. ¿Y las medidas contra el calor, por culpa del calentamiento global y la Agenda 2030? Dicen que los niños no pueden estar en los colegios a mediodía, si no hay aire acondicionado, pero los miembros de mesa y los votantes van a sudar de lo lindo.
EL domingo 28 de mayo ocurrió un fenómeno extraño. No me refiero a las elecciones municipales, sino a lo que sucedió en el estadio Nuevo Mirandilla (al que se le puede volver a cambiar el nombre) en un partido de infarto. El Cádiz CF derrotó al Celta por 1-0 y terminó la penúltima jornada con 41 puntos, sin estar salvado. Eso es raro, ya que en las últimas temporadas se consideraba que con 41 puntos estaba garantizada la permanencia. Hay excepciones, como el Betis, que descendió con 42 puntos en 2009, empatado con el Getafe, que se salvó. Y el Cádiz se lo juega con el Getafe. Por eso, hay que advertirlo: atención, el Cádiz no está salvado. Y debería tener mucho cuidado, porque si no puntúa en Elche le puede ocurrir una desgracia.
SE suele decir que Sevilla es una ciudad dual. O que hay dos Sevillas. Como la del Sevilla FC y la del Real Betis. Eso se nota más en días como hoy, tras la final de la Europa League. Sin embargo, para votar en unas elecciones municipales, hay tres Sevillas. Hasta 2007 eran la Sevilla del PSOE, la Sevilla del PP y la Sevilla del PA. Se turnaron en la Alcaldía, según los pactos. Sin embargo, ahora, las tres Sevillas son: la que vota al PP, la que vota al PSOE y la que cambia el voto para quitar y poner los alcaldes. Y ahora, tras la entrada de José Luis Sanz en la Alcaldía, Sevilla está a la espera de una conjunción astral.
CÁDIZ volvió a demostrar en las elecciones municipales que es diferente. Una de las ciudades más raras de España. El terror de los encuestadores, que no se comprometían a acertar si habría mayoría de izquierdas o de centro derecha. Algunos le daban dos concejales a Vox, que se quedó cerca, y uno a Podemos, que se quedó lejos. En conjunto, ha sido un gran triunfo del PP. Pero, ¡cuidado! Aunque Bruno García tenga la mayoría absoluta, no ha sido como las de aquellos tiempos en que alcanzaban entre 16 y 18 concejales. Por supuesto que el resultado del domingo tiene incluso más mérito. Pero el nuevo alcalde, Bruno García, lo deberá administrar con cuidado, prudencia y generosidad con los rivales, sabiendo que medio Cádiz no le ha votado. Cuando vean la diferencia, Bruno debería ganar más partidarios, pues hacerlo peor que el anterior es difícil.
A José Luis Sanz le está pasando lo mismo que a Juan Espadas en 2015, pero al revés. La gente decía entonces: “no ha ganado el PSOE, ha perdido el PP”. Y se atribuía la derrota de los populares a que Zoido había dilapidado su gran victoria de 2011 y a que Rajoy no paraba de recortar en la Moncloa. El domingo la gente decía: “no ha ganado el PP, ha perdido el PSOE”. Y se atribuía la derrota no al pobre Muñoz (que se quedó arrastrado por el tsunami), sino a la espantá de Juan Espadas, que renunció a la Alcaldía; y a las genialidades de Pedro Sánchez, que cuantas más paridas promete más indignación provoca. Ya nadie habla de Doñana, ¿verdad? ¿Vieron los resultados en Huelva y su provincia la noche del Rocío? Es que no aprenden. Pero José Luis Sanz sí que ha aprendido y tuvo la flor en su sitio el 28-M.