LA globalización nos puede llevar a adoptar los usos y las costumbres de otros países. Es lo que está ocurriendo con las fiestas de Todos los Santos y los Fieles…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
LAS lluvias torrenciales y los vientos provocaron ayer inundaciones y destrozos en Andalucía, sobre todo en las provincias de Sevilla y Huelva. Coincidía la fecha con el aniversario de la dana que causó 229 muertos en Valencia, lo que acentuaba el impacto psicológico. En Sevilla se sabe que las grandes…
ESTE país, quizás el más progresista del mundo (con permiso de Venezuela), es la locomotora económica de Occidente. Tiene la mayor subida del PIB; batimos el récord de empleo y de parados a la vez, y es el único de la OTAN que no puede llegar al 5% en gastos…

TERMINO esta trilogía de artículos dominicales sobre la vivienda, recordando que el populismo del Gobierno del PSOE sanchista y Unidas Podemos, con sus colegas independentistas de ERC y los proetarras de Bildu, está en el camino de conseguir que el sueño de tener un piso propio sea cada vez más difícil de cumplir para los jóvenes. No construyen viviendas sociales, los alquileres están más caros que nunca, las hipotecas han subido a niveles de impagables y, como remate, conceden mayores ventajas a las okupaciones de pisos. Para colmo, cuando Pedro Sánchez, en plena campaña de promesas, anuncia que avalará el 20% de las hipotecas a jóvenes, los líderes de Podemos dicen que es “una infamia”. Es un Gobierno que destrozará el mercado inmobiliario en pocos años, si las urnas no lo remedian.
PONER una valla publicitaria, o quitarla porque es considerada electoralista, sería lo de menos. Tiene guasa que la plataforma, o coalición (o lo que sea) de Adelante e Izquierda Unida Gaditana presente el proyecto del nuevo Pabellón Portillo. Ese proyecto ya lo presentó antes su correligionario Martín Vila, concejal de Urbanismo, y prometió que empezarían las obras antes de que terminara el actual mandato municipal. No lo cumplió, como tampoco han cumplido la inauguración del nuevo Teatro de Verano (antes Pemán). En ocho años que han gobernado (es una metáfora, es un decir) no han dejado su impronta en nada utilizable, excepto en un museo carnavalesco sin contenidos.
POR un concejal, por un puñado de votos, Antonio Muñoz o José Luis Sanz conseguirán la Alcaldía de Sevilla o se quedarán en la oposición. La fortuna de uno será la desgracia del otro. Se lo juegan todo a un penalti. Eso es lo que dicen las encuestas y lo que ha escrito Iván Redondo, el gurú defenestrado que ahora patrocina a Yolanda Díaz, y que considera favorito a Muñoz por un concejal. El 28 de mayo será un día grande. Se celebra el Rocío en Andalucía y en Cataluña. Y, además, las elecciones municipales. En la víspera del lunes de Pentecostés, pocas horas antes del salto de la reja, se conocerá quién es el próximo alcalde. Unos darán saltos antes de tiempo.
EN vísperas de elecciones abundan las promesas y las inauguraciones. La apertura de la Casa del Carnaval (antes llamado Museo del Carnaval) es presentada por el equipo de gobierno de Kichi como un gran éxito. Ciertamente, es de lo poco visible que pueden mostrar a los gaditanos, después de ocho años en el Ayuntamiento. También es verdad que Teófila Martínez, en sus años de alcaldesa, lo intentó y no pudo inaugurar un Museo del Carnaval, entre otras cuestiones porque se equivocaron con el proyecto fallido en la plaza de la Reina. Las obras en el antiguo Palacio de Recaño permiten intuir que el museo (o lo que sea), se convertirá próximamente en realidad. Pero aún es un proyecto pendiente de concreciones.
YA pasó la final de Copa. Pero lo que pasó fue lo suficientemente lamentable como para que no quede en el olvido. En Sevilla se han disputado muchas finales de fútbol, europeas y españolas. Y, además, el Sevilla y el Betis han participado en competiciones que han atraído a hinchas ingleses, alemanes, italianos, franceses, escoceses, holandeses, turcos y lo peor de cada casa. Según algunos guarrólogos, hasta ahora la hinchada que más ensució la ciudad fue la del Celtic de Glasgow. Sin embargo, ha sido superada por la del Osasuna de Pamplona. El impacto económico de la final creo que fue de 50 millones, según dijo el alcalde, Antonio Muñoz, pero el impacto de porquería ha sido enorme. Otro récord...