ANTES se decía “Fulanito vive a cuerpo de rey”, y no era por don Juan Carlos I, que acaba de publicar sus memorias. Sin embargo, ahora (cuando no invitan al…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
ABEL Moreno Gómez es un triunfador. Y eso despierta la admiración en la gente sencilla, y es lo que se quedará para la posteridad. Pero también origina envidia, entre los que intentar regatear méritos. Abel Moreno es una figura de la música popular sevillana, andaluza y española, pero no siempre…
A los pocos días de la catástrofe, escribí que Carlos Mazón debía dimitir como presidente de la Generalitat valenciana. Es lo que pensaban (y siguen pensando) la mayoría de los ciudadanos. Ha sido un error mayúsculo que permaneciera en el cargo, con la excusa de que sería el piloto de…

EL sorteo de las preliminares del Carnaval cada año se parece más a la fase de grupos de la Champions League. Con sus cabezas de serie y su parafernalia. La actuación inaugural la disputará una comparsa de Barcelona, denominada ‘El Botas’, en la que no canta Leo Messi. Unos días antes de este sorteo, la Junta de Andalucía (esos del Trifachito, según decía Susana Díaz) ha nombrado Bien de Interés Cultural al Carnaval de Cádiz. Eso no significa que para cambiar las bases del concurso del COAC le deban pedir permiso a la Comisión del Patrimonio. Pero, a partir de ahora, el Carnaval es como un monumento. Así debe ser considerado.
EL accidente del microbús de la línea C-5 de Tussam en la Campana fue algo más que un accidente. Por su aparatosidad, por lo que pudo pasar, por el lugar tan céntrico, por la fecha (en pleno puente de la Inmaculada), ha sembrado dudas y cierto alarmismo. En el Ayuntamiento se le ha quitado hierro al asunto para tranquilizar. Los partidos han estado a la altura de la circunstancia, con realismo y sin populismo. Ante desgracias como esta, buscar responsabilidades del alcalde está de más. Juan Espadas tendrá más o menos aciertos, pero no puede evitar los fallos técnicos de un microbús de Mercedes, cuyo origen aún no se ha explicado de un modo comprensible.
LA victoria del Cádiz Oviedo supo a gloria, más allá de tres puntos importantes para reforzar el liderato. Con el triunfo se proclaman campeones de invierno y se presenta la candidatura para el ascenso directo a Primera en verano. Además, se rompe un maleficio que duraba 42 años. Desde 1977 (la temporada del primer ascenso con Enrique Mateos) no ganaba el Cádiz en el campo del Oviedo, un equipo gafe, que prolongó la estancia del Cádiz en Segunda B. Sin embargo, ahora el equipo va viento en popa, a pesar de los que intentan sembrar tormentas. No merece la pena recordarlo, pero es vergonzoso enturbiar los buenos momentos. Hay que apoyar a este Cádiz, con vitola de campeón.
ESO que llaman El Clásico, entre el FC Barcelona y el Real Madrid, a disputar el miércoles, día 18, es algo más que un partido de fútbol. Puede ser incluso determinante para el pacto de Gobierno entre el PSOE de Pedro Sánchez y Unidas Podemos de Pablo Iglesias, ya que según lo que ocurra quizás condicione la posición definitiva de ERC y hasta de JxCat. Puede parecer exagerado, pero el conflicto de Cataluña no se basa en la razón, sino en la pasión. Y no hay nada que influya más en los sentimientos que el fútbol. La gente puede cambiar de pareja, incluso de ideas políticas, pero se conocen pocos casos de mudanza de hinchas al eterno rival.
LA rotunda victoria de Boris Johnson en las elecciones del Reino Unido certifica que el Brexit es inevitable. A excepción de los escoceses (son como los catalanes de allí), el respaldo es amplio, por lo que pueden esgrimir que los británicos han apoyado claramente la salida y no quieren un segundo referéndum. En Gibraltar, y en el entorno de su comarca, tendrá consecuencias. A partir del 31 de enero, la Verja delimitará una frontera, les guste o no. Las autoridades insisten en colaborar para evitar complicaciones. Pero, en Gibraltar, ya están valorando que deben procurar una menor dependencia de la mano de obra extranjera. El Gobierno de Pedro Sánchez ha actuado hasta ahora como si todo se mantuviera igual, pero con más bullas en la frontera. Es una insensatez.