AL principio de la democracia parlamentaria, cuando los políticos se insultaban menos, concedían a los gobernantes cien días de gracia. Tres meses y pico en los que se les permitía…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
COINCIDIENDO con la fiesta de Santa Teresa de Jesús, el consejero de Presidencia y otras cuestiones de la Junta de Andalucía, Antonio Sanz Cabello, fue nombrado consejero de Sanidad. El día elegido hace honor a lo que nos enseñó la santa de Ávila: “Nada te turbe, nada te espante”. Para…
EL sanchismo se mantiene en el poder gracias a que ha buscado la división y el enfrentamiento entre los españoles. Los ciudadanos de este país son divididos entre progresistas y reaccionarios (o fascistas), desde una falsa superioridad moral, que señala a los progresistas como los buenos y a los reaccionarios…
TODOS los congresos tienen una inauguración de cierto relieve. Resulta un poco raro que el Congreso Regional del PSOE-A sea inaugurado el sábado en Armilla (Granada) por José Luis Rodríguez Zapatero, que no es andaluz, ni ha tenido especial predilección entre los socialistas andaluces. Pero bueno, no pasa nada. Ya se sabe lo único que va a pasar: que María Jesús Montero será elegida nueva líder andaluza del PSOE, tras la defenestración de Juan Espadas. Más que del pasado, ahora se trata de ver la influencia que tendrá para Andalucía y para la candidata en el futuro. Y el futuro es impredecible por las cambiantes circunstancias nacionales y extranjeras.
A Bruno García le puede pasar lo mismo que a Kichi, si no cambia la tendencia. Ambos llegaron a la Alcaldía prometiendo un frenazo a la pérdida de habitantes de Cádiz. Kichi, en sus ocho años, no lo consiguió, sino que aumentó la pérdida. De modo que la capital gaditana es el tercer municipio de la provincia. Y, de seguir su trayectoria descendente, puede ser la capital menos poblada entre las ocho de Andalucía. Con lo cual se ve que sufre un fallo estructural. Y que no se dan las condiciones para ganar habitantes. Esas medidas pasan por la vivienda, como es perogrullesco de suponer, pero también por el empleo. Si los gaditanos jóvenes emigran masivamente, sus hijos viven en otros municipios.
LOS tiempos cambian una barbaridad. Desde que está de vuelta Donald Trump en EEUU, ya no sabemos quiénes son los amigos y los enemigos. Y eso no tiene sólo consecuencias para los yanquis, también para Sevilla, Andalucía, España y la humanidad. La gente que no entiende bien estas cosas pregunta si también les van a poner aranceles a los vuelos con Nueva York que perdimos en Sevilla y encontraron en Málaga, o a los hipotéticos con Miami. Teniendo en cuenta que a los norteamericanos viajeros les cobran el IVA y en algunos sitios la tasa turística. No se sabe cómo lo hacen, pero siempre pagan los mismos, que somos todos, y cobran los mismos, que son ellos. O sea, los que gobiernan.
HAY un nuevo orden internacional. O quizá sea un desorden. Todavía no se sabe lo que es. Tampoco se sabe quiénes son los amigos, que ahora están cambiando de un día para otro. Sin embargo, está clarísimo que la Unión Europea se está quedando fuera de ese juego, no sólo con Ucrania. Y que España se puede quedar incluso aislada dentro de la UE. Esto sería como el episodio del conde Lucanor, con el rico arruinado que sólo comía altramuces y el mendigo que se comía las cáscaras que tiraba. España se va a comer las cáscaras, o puede que ni eso. Se ha colocado en el sitio equivocado.
A finales de enero, los representantes de la Junta de Andalucía, la Diputación Provincial, el Ayuntamiento de Cádiz y la UCA anunciaron un plan para salvar el edificio de Valcárcel, con una inversión “mínima” de 20 millones de euros que pagarán entre todos. Supuestamente las obras empezarán antes de que acabe 2025. El edificio, en el futuro, tendrá “un uso universitario”. ¿Y cuál es ese uso? No se sabe. Porque el rector, Casimiro Mantell, ya dejó claro que Ciencias de la Educación no se moverá de Puerto Real. Por consiguiente, se van a gastar 20 millones en salvar el edificio, lo que está muy bien. Aunque para algo que no se sabe lo que es. Se ha hablado del grado de Farmacia. Y de otros estudios universitarios sin concretar. Y eso nos lleva a una cuestión de fondo.