A muchos gaditanos y gaditanas les importa poco que se pierdan dos o tres hoteles por el camino de la burocracia. Pero se formaría la marimorena si se perdiera una…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
SEVILLA fue la clave para la renovación del PSOE. En Suresnes 74 empezó todo, cuando el compañero Isidoro salió a hombros como el mesías del futuro. Entonces se dijo lo mismo que dicen ahora los sanchistas: que los viejos estaban chocheando. Los jovencitos renovadores se quedaron con las siglas del…
PARA entender un poco la realidad de Cataluña, que en el resto de España está tergiversada, nos ayudan las cuentas electorales. Es decir, la evolución de los resultados en las últimas elecciones. Entre el referéndum ilegal que montó Puigdemont el 1 de octubre de 2017 y la convocatoria de hoy,…
ES una vergüenza para Cádiz lo que está sucediendo en el Castillo de San Sebastián. Es una vergüenza el silencio que guardan las asociaciones y entidades culturales y patrimoniales, los arquitectos incluso progresistas, las instituciones, todos los que protestan por asuntos menores. El Castillo de San Sebastián, en condiciones normales (es decir, no anormales), debería ser Patrimonio Mundial de la Humanidad. Aunque la Unesco no lo tenga en su lista, es uno de los monumentos icónicos de Cádiz; y está en la línea de visión paisajística de la Caleta. Junto al otro castillo, el de Santa Catalina, completa un testimonio extraordinario de lo que fue el Cádiz de las fortificaciones construidas tras el asalto anglo-holandés de 1596.
POR tercer mandato consecutivo, Alberto Núñez Feijóo ha tomado posesión como presidente de la Xunta de Galicia. Prometió su cargo en presencia de Mariano Rajoy, lo que ha vuelto a disparar las profecías que le convierten en el delfín del PP, para aspirar en el futuro a la Presidencia del Gobierno de España. Sin embargo, se lo fían a la larga. En el PP dan por supuesto que Rajoy aguantará cuatro años más en la Moncloa. Y, para ello, se está rumoreando que convocará elecciones en mayo del próximo año, si no le aprueban los presupuestos. La pelota vuelve al tejado del PSOE, que en primavera todavía no estará presentable.
HOY se cumplen 70 años de la muerte de Manuel de Falla, que falleció en Alta Gracia (Argentina), aunque la tumba con sus restos está en la cripta de la Catedral de Cádiz. El próximo día 23 se cumplirán los 140 años de su nacimiento en una casa de la Plaza de Mina gaditana, que todavía existe, aunque no convertida en un museo con la dignidad que se merecería. Significa que faltan cinco años para el 75 aniversario de su muerte, y 10 años para el 150 aniversario de su nacimiento. En cualquier ciudad medianamente civilizada, se empezaría ya a pensar en la conmemoración de algo que debe ser mucho más que una efeméride: la recuperación de Manuel de Falla para Cádiz, la ciudad donde nació y donde se hizo el mejor músico español del siglo XX.
AL poco tiempo de ser elegido alcalde José María González Santos, en algunos medios de comunicación forasteros del mundo mundial empezaron a denominar a Cádiz como Kichilandia. Por supuesto, lo hicieron algunos que no habían venido siquiera, por lo que ignoraban el estado de la ciudad. Se dejaron llevar por falsas impresiones, algunas propagadas por el propio alcalde, cuando habló en La Sexta de ese ambiente que convertía a Cádiz en una versión andaluza de Calcuta. O fascinados por aquella foto de Adrián Martínez de Pinillos, en volandas de la Policía, con motivo del desahucio inaugural del cambio. Cosas así, de cara a la galería del coleccionista de sorpresas.
HA sido raro que nadie proponga el nombramiento del 6 de noviembre como Día Mundial del Turismo Cofrade. Ese día se clausuró la Muestra de Semana Santa y Turismo Religioso de la provincia de Sevilla, que organizó la Diputación. Pero ese día pasará a la historia como el del regreso del Señor del Gran Poder, desde la Catedral a su basílica, ante más de 200.000 personas, en la procesión más multitudinaria que se ha visto en Sevilla en las últimas décadas. Por supuesto, que no se organizó para hacer turismo, sino para acompañar al Señor en el Año de la Misericordia. Y atrajo a miles de devotos.