SE van a cumplir cinco años desde que empezó el confinamiento del Covid. Es curioso que el Gobierno intente perpetuar la memoria histórica de un dictador que murió hace 50 años y no nos acordemos apenas de lo sucedido hace sólo cinco años. El estado de alarma duró 100 días (3 meses y 8 días), en los que permanecimos encerrados en nuestros domicilios con pocas excepciones. Las medidas se fueron relajando gradualmente, aunque con algunas decisiones tan discutibles como no poder viajar de una provincia a otra, sin tener en cuenta los kilometrajes de las distancias. Es decir, que nos podíamos desplazar desde Sevilla a Cazalla de la Sierra, pero no a Jerez de la Frontera o Almonte.
NO sólo de los barrios pobres vive la mala fama de Sevilla. También está la mala fama de tener el barrio más turistificado de España, el de más pisos turísticos y veladores por metro cuadrado, el de menos vecinos supervivientes. Una pena y un desastre que no se pueden aguantar. Los lamentos por el barrio de Santa Cruz se vienen oyendo desde el siglo pasado. Pero han alcanzado un singular frenesí en los últimos años. Porque con el covid se dio rienda suelta a la expansión de veladores que ya había comenzado antes. Y sigue sorprendiendo que mientras el barrio de Santa Cruz está hasta las trancas de turistas por las calles, en la Judería de San Bartolomé, al otro lado de Santa María la Blanca, se detecta un cierto sosiego. Aunque existen pisos turísticos, la densidad es menor.
COMIENZA oficialmente la Santa Cuaresma. Es Miércoles de Ceniza. Algunos piensan que la Cuaresma en Sevilla empieza cuando vemos la espalda de Baltasar en la Cabalgata de los Reyes Magos. O, más propiamente, cuando se dice “Podéis ir en paz” en la función principal de Jesús del Gran Poder. Sin embargo, el calendario litúrgico tiene las fechas en base al calendario lunar de Parasceve. La Cuaresma empieza hoy, y no hay más que hablar. Es día de ayuno y abstinencia. Un precepto que muchos confunden con cambiar la carne por el pescado. De ahí que a los ágapes cofrades se les suela denominar pescaítos. El Rinconcillo y otros bares han alcanzado justa fama con sus tapas de Cuaresma extendidas al resto del año. Bacalao con tomate, espinacas con garbanzo, pavías, etcétera.
ES un error político que la Junta de Andalucía rechace la quita de la deuda que ha propuesto la ministra de Hacienda. Otra vez el PSOE le ha tendido una trampa al PP, como en la polémica por las pensiones. Una cosa es la realidad y otra el relato, ya lo sabemos. Pero lo que se queda es el relato que se impone. Porque a veces resulta más atractivo de creer. Pasó con las pensiones. El PP reculó, y se tragó al final el palacete del PNV en París, que había colocado sin necesidad en el debate; aunque otras medidas del Gobierno se quedaron fuera y apenas se ha difundido. Y, en la quita de la deuda, les van a marcar otro gol. Es un asunto técnico, y lo que se entiende es lo sencillo.
LA Medalla de Andalucía de Abel Moreno tiene mucho mérito. La Junta es reticente a conceder esas distinciones a hermandades y a todo lo relacionado con la Semana Santa. Quizá temen un aluvión de peticiones y los agravios comparativos catetos. De ese modo se han cometido (ahora y antes) algunas injusticias, como no haberla otorgado a Luis Álvarez Duarte, ni en vida, ni a título póstumo cuando falleció en 2019, a pesar de que tiene imágenes de valía y gran devoción en las ocho capitales y las ocho provincias andaluzas. Por el contrario, en otras actividades, incluso folklóricas, se emplea una mayor generosidad para el medallero.