LA devoción a la Virgen del Rosario forma parte de la historia de España y la humanidad cristiana. En Cádiz, cuenta con el valor añadido de ser la Patrona de…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
TODAVÍA quedan trianeros y trianeras viviendo en Triana. Son menos que hace medio siglo, aunque no han sido declarados vecinos en riesgo de extinción. En estos días de octubre, cuando el verano todavía asoma la patita por debajo de la puerta del otoño y se despoja de los últimos calores,…
HE escrito en varias ocasiones que la estrategia electoral del PSOE pasa por hinchar a Vox. Por eso, lo que hace Pedro Sánchez va en esa dirección. Con un PP debilitado y un Vox fortalecido la diferencia entre las fuerzas del centro-derecha y la extrema derecha se quedaría diluida. Y…
ESTO lo dijo Albert Rivera, el domingo pasado, para explicar lo de Ciudadanos: “Los liberales de Cádiz han vuelto para gobernar España”. ¡Ole! Antes de reunirse en asamblea con los suyos, no se sabía lo que iba a ser Ciudadanos, porque unos querían definirse como “liberales y progresistas”, mientras que otros apostaban por ser “socialdemócratas”. Hoy en día, raros son los que en España no nos consideramos liberales, progresistas y socialdemócratas. Vale para cualquier Íñigo, lo mismo para Méndez de Vigo, que es el ministro más liberal, progresista y socialdemócrata del PP (e incluso acude a los Goya, a aguantar), como para Errejón, que es el líder más liberal, progresista y socialdemócrata de Podemos (e incluso acudirá a Vista Alegre, como el otro a los Goya).
PARECE que los abogados, los procuradores y demás familias que acuden a los Juzgados dispersos todavía no lo han entendido. Lo que van a construir en Cádiz, tras el pacto de la Junta y el Ayuntamiento, no es exactamente la Ciudad de la Justicia. Si acaso será el Pueblecito de la Justicia. No es lo mismo una ciudad que un pueblecito. Por ejemplo, se supone que las diputaciones se ocupan principalmente de los pueblecitos; sin embargo, en Cádiz, Irene García atiende también a la ciudad y echa cables. Puede que sea porque en el Ayuntamiento muchas veces se comportan como si estuvieran gobernando un pueblecito pequeño.
TANTO en las reuniones de amigos como en las tertulias de cierto nivel se está planteando una cuestión básica. Personajes como Donald Trump, Marine Le Pen, o los ultraderechistas europeos ¿son populistas o fascistas? Personajes como Pablo Iglesias, su maestro Tsipras antes de reciclarse, Beppe Grillo, o los anticapitalistas europeos ¿son populistas o comunistas? En realidad, se trata de un problema de palabras. Ya lo anunció San Juan: “En el principio fue la Palabra”. Pero después llegaron las palabras humanas, y muchas las carga el diablo para confundir. O, como escribió Philip Roth en Operación Shylock: “Las palabras sólo sirven para echarlo todo a perder”. Así que con las palabras hemos colocado a Donald Trump y a Pablo Iglesias en el mismo saco, siendo ellos tan diferentes.
ENTRE las aportaciones de las pantallas LED de Cádiz, no sólo estuvieron los anuncios del segundo puente y el carril bici que todavía no se ha inaugurado. Además de informar de las farmacias de guardia, el tiempo y otros datos, se puso en marcha una campaña denominada Sin poesía no hay ciudad (el lema no era original). No sólo en las pantallas callejeras, sino también en autobuses, mupis y sitios así. Nunca fue agradecido ese gesto poético, ni siquiera por algunos culturetas que se integraron después en el plan C. Sin duda, porque la ocurrencia no había sido de ellos, ni mucho menos de Eva Tubío, que entonces era funcionaria y estaba preparando el camino al señor que viniera después. En fin, que la ocurrencia había sido del equipo de la señora Martínez.
HAY una plaza en Cádiz que está gafada. De Sevilla se llama. De Sevilla tenía que ser. Todo lo que se hace (y no se hace) allí es desastroso. Está en un enclave de los principales de la ciudad, justamente en la confluencia del transporte por mar, por tren y por carretera. A la vera del Puerto, de la estación de Renfe y de la nueva estación de autobuses. Es de lo primero que ven nuestros viajeros. Justo frente al Palacio de Congresos. En un momento dado, la anterior alcaldesa, Teófila Martínez, dijo que sería el nuevo centro. No sé si llegó a decir que sería la gran plaza del siglo XXI, o esto lo he imaginado. Ni antes, ni ahora, se redondea aquello.