HEMOS leído en la prensa (o sea, en el Diario) que este verano no van a funcionar los lavapiés ni las duchas en las playas de Cádiz, según ha confirmado…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
SE suele recordar que la Feria de Sevilla fue ideada por un catalán, Narciso Bonaplata, y un vasco, José María Ybarra. Por supuesto, no eran un catalán y un vasco independentistas, ni la Feria ganadera de 1847, con sus 19 casetas en el Prado, era como la de 2024. Sin…
FALTAN siete días para las elecciones en el País Vasco. Los de EH Bildu sueñan con ganar. Sería su primera vez. ¿Pasearán en gabarra? El mejor padrino para botarla sería Pedro Sánchez, que tanto les ha ayudado, hasta el punto de que ya pocos se acuerdan de que son los…
CON tanto hablar de las líneas rojas, ha resultado que Pedro Sánchez las ha introducido en la mismísima Moncloa. Tenemos un Gobierno de líneas rojas, con un fondo gris de borrasca, y unos ministros que piden la dimisión o la destitución de otros ministros. Tenemos un Gobierno en el que una parte de los ministros (los de Unidas Podemos) juegan a ser de la oposición, aunque cobran con cartera. Ya no hay ministros sin cartera, como se decía antes, pues ahora todos quieren llegar a fin de mes y al final de la legislatura, sea como sea, aunque sea haciendo el ridículo. Y también hay ministros de verdad, como Margarita Robles, que se pitorrean de los ministros de mentira, como la podemita Ione Belarra, la invita a dialogar con Putin, y dice que se va a morder la lengua, por no darle un mordisco a la otra.
LA Catedral de Cádiz cumplió tres siglos el pasado martes, 3 de mayo. Todavía no la han trasladado a otra localidad de la provincia, que por cierto tiene dos diócesis: la de Cádiz y Ceuta y la de Jerez-Asidonia. La Catedral es el primer templo diocesano. Sus obras fueron largas, tanto que todavía no han acabado. Faltan varios espacios previstos. Además de la linterna que remataría la cúpula. La Junta de Andalucía incluso aprobó el proyecto de la linterna en la restauración de Juan Jiménez Mata, pero el Ayuntamiento no dio licencia (cuando era alcaldesa Teófila Martínez), por considerarlo inapropiado. Desde luego, lo primordial es conservar bien la Catedral, que deja mucho que desear. Y no ya por falta de interés del Obispado, sino por el mal de la piedra y sus costosos y constantes arreglos derivados.
A la gente le gusta quejarse y protestar. Esto no lo han inventado los sindicatos de clase ni el sindicato de Vox, sino que lo aprenden los bebés desde que nacen. “El que no llora, no mama”, advierte el rico refranero español. Con la Feria de Sevilla pasa lo mismo. En 2023 cumplirá medio siglo desde el traslado al real de Los Remedios. Pero lo curioso es que los vecinos de Los Remedios llevan medio siglo quejándose por el traslado de la Feria y en 2023 lo quieren celebrar. Precisamente, cuando la gente se queja por las bullas de este año, y los partidarios de cambios insinúan que se debería mudar otra vez, al Charco de la Pava, o a meterse en otro charco, donde sea.
LOS franciscanos han anunciado que se irán del convento gaditano de San Francisco a partir del 1 de septiembre. Al parecer, atenderán la iglesia con frailes de su convento de Chipiona. Es una noticia triste. No sólo para los creyentes católicos, sino también para los ateos. Porque es un síntoma más de la decadencia de la ciudad. Se van los franciscanos, se fueron los jesuitas, se fueron los mercedarios, y los carmelitas se quedaron en San Fernando, como Zara y Massimo Dutti. Ya sé que parece una herejía, pero es la realidad. Se van los frailes porque escasean las vocaciones, y hoy en día muy pocos jóvenes quieren renunciar a las libertades mundanas para ser frailes. Pero también se van porque su permanencia en Cádiz es ruinosa. Todavía no se han ido de ciudades donde hay más actividad económica y más participación religiosa.
POR un puñado de votos (y pocos escaños) se va a decidir el próximo Gobierno andaluz. Eso condiciona todo, hasta la elección de la fecha electoral del 19 de junio, la menos mala para Juanma Moreno. Ha tenido en cuenta las encuestas, incluso la coincidencia el 19 de junio con las elecciones legislativas francesas, donde otra vez se votará entre el centrismo de Macron o el extremismo de Le Pen, con una izquierda decadente y divida. Un escenario similar. En Andalucía, el discurso de las líneas rojas se puede aplicar a la ultraderecha, pero también a la ultraizquierda anti OTAN, que ya no sabe qué hacer para camuflar su plumero putinesco de nostalgia ruso/soviética.