EN la polémica por los cambios de nombres de las calles, la opinión de los vecinos es importante. Son los afectados. Pues si te cambian el nombre de la calle,…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
AL ministro de Transportes, Óscar Puente, lo tienen ya en el punto de mira la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Sevilla. Es un ministro peculiar, con una parte buena y otra mala. La buena es que suele decir lo que piensa y miente menos que otros compañeros de…
ETA fue fundada en 1959, cometió crímenes durante el franquismo, los siguió perpetrando en la democracia, anunció el cese de su actividad armada en 2011, pero no se disolvió oficialmente hasta 2018. ETA duró casi 60 años; es decir, 20 años más que el franquismo, y de ellos más de…
SIEMPRE que un concejal dimite por discrepancias con su grupo político, le reclaman que devuelva el cargo que consiguió. Se ha vuelto a ver en el caso del ya ex portavoz de Ciudadanos en Cádiz, Domingo Villero, que ha dimitido, pero continuará como concejal no adscrito. Unos se van definitivamente, incluso de la política, y otros se van del partido, pero se quedan en el Ayuntamiento, como Villero. Hay que decir, muy claramente, que está en su derecho. La legislación electoral española es rotunda en ese sentido. El acta del concejal es personal. Y sólo se puede transferir a otra persona de la lista si el titular renuncia a seguir en el Ayuntamiento, o si fallece.
EL aeropuerto de San Pablo tiene el objetivo de conectarse con todo el mundo, con los cinco continentes. Todavía no está conectado con la estación de Santa Justa por tren, a pesar de que sería un sencillo paseo ferroviario. Pero por el aire, lo que es por el aire, quieren llegar a Nueva York, a Sidney en Australia a Pekín en China, a Tokio en Japón, a donde haga faltapara llenar los hoteles de cinco estrellas. En esa misión, el alcalde, Juan Espadas, está firmemente empeñado, y cuenta con el apoyo decidido de su delegado del Turismo y otros menesteres, Antonio Muñoz. Por eso, igual que consiguen para Sevilla grandes premios de espectáculos nacionales e internacionales, acogieron en Fibes un congreso mundial del turismo de la WTTC, en el que conocieron a capitostes de todo el universo. Aún sigue dando frutos, a título póstumo.
EN España pasamos fácilmente de la historia a la histeria. Al día de ayer me remito. Hemos vivido un día de la Fiesta Nacional de lo más ajetreado. Otros años, al llegar el 12 de octubre, se dedicaban a despotricar de la colonización de América, y a decir que los españoles habían ido allí a exterminar indígenas. Pero este año se han callado, quizá porque los indígenas de Ecuador han asaltado el Parlamento y quieren liquidar a un presidente que se llama Lenín, y defiende “el socialismo del siglo XXI”. Si este gachó les dice: “Mi nombre es Lenín, Lenín Moreno”, esos indígenas se ponen peor que si hubieran visto al fantasma de Cristóbal Colón.
UNO de los tópicos del fútbol dice que los campeones ganan incluso cuando juegan mal. Al Cádiz le pasó en Málaga, donde pudo conseguir un triunfo relativamente cómodo y se complicaron el resultado en la segunda parte. El partido estaba para ganar por 0-3, y sin sufrir. Sin embargo, tuvieron mucha suerte, porque el Málaga, en su reacción final, creó suficiente peligro para empatar. Al Cádiz le da igual regalar el balón, pero fallaron pases de un modo inmisericorde, hasta terminar sólo con un 25% de posesión. Esos fallos perjudicaron, porque en la segunda parte sí sufrieron.
EN otras ciudades andaluzas, incluso de la provincia, hay un debate social sobre la influencia del urbanismo y la vivienda en los barrios marginales. El concepto del barrio marginal es delicado, ya que no sólo se asocia con niveles bajos de renta y pobreza, sino también con el tráfico de droga, la delincuencia y la inseguridad. Todo se pone dentro del mismo saco. En Cádiz se vivió algo parecido, en la década de los 80 del siglo pasado, con el Cerro del Moro. Allí realizó una gran labor social el actual Defensor del Pueblo Andaluz, Jesús Maeztu, cuando era párroco y colaboró con los movimientos vecinales. Buscaron la ayuda de las administraciones. Empezaba un proyecto del que Cádiz puede estar orgulloso, a pesar de que también hubo sombras y se ha tardado más de 30 años.