EN la polémica por los cambios de nombres de las calles, la opinión de los vecinos es importante. Son los afectados. Pues si te cambian el nombre de la calle,…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
AL ministro de Transportes, Óscar Puente, lo tienen ya en el punto de mira la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Sevilla. Es un ministro peculiar, con una parte buena y otra mala. La buena es que suele decir lo que piensa y miente menos que otros compañeros de…
ETA fue fundada en 1959, cometió crímenes durante el franquismo, los siguió perpetrando en la democracia, anunció el cese de su actividad armada en 2011, pero no se disolvió oficialmente hasta 2018. ETA duró casi 60 años; es decir, 20 años más que el franquismo, y de ellos más de…
LA buena gente que es inteligente pensará: esta es la inocentada del año. Se dice… Así, de pronto, coincidiendo con el 28 de diciembre. Se dice… Como se decía en el programa Saeta de Radio Vida, en los tiempos de Carlos Schlatter. Se dice que van a cobrar a los abonados de las sillas y palcos el 21% de recargo por el IVA. Se dice y la gente empieza a pensar mal: esta es la primera subida de impuestos de Pedro y Pablo. Antes de que tomen posesión, Hacienda que somos todos (pero sobre todos ellos) ya ha empezado a meterle mano a las cofradías donde más les duele, que es en la cartera.
LAS mesas a las que me refiero no son las de negociación bajo cuerda de Adriana Lastra y la Marta de ERC, sino a las de estas fechas tan bonitas y entrañables. En ellas se nota que los productos gastronómicos navideños de Cádiz están mal promocionados. Quizás les falta una feria en Londres, para que Irene García y sus diputados provinciales puedan promocionarlos. En Fitur tiene mal rollo, por las fechas, que suelen coincidir con el Carnaval. Y a la gente, entre pestiños, erizos, ostiones y demás, se les suele olvidar lo navideño. Ahí también se pudo hacer mejor, en su momento. Pues los pestiños no son estrictamente gaditanos, sino que se les considera típicos de Andalucía, en general. Por el contrario, hay otros más identitarios de Cádiz. Se pudo hacer la Alfajorada.
LOS Reyes de Holanda le han hecho un favor impagable a Sevilla. Desde que están Juan Espadas y su concejal Antonio Muñoz al frente del turismo no paran de buscar a un Obama, a una Rosalía, a un Pedro Duque o lo que sea para promocionar a Sevilla en todo el mundo y que abarroten los hoteles, y que construyan tropecientos más. Sin embargo, lo mejor a veces sucede por casualidad. Y así la Familia Real de Holanda ha felicitado las fiestas navideñas con una foto en la que los reyes Guillermo y Máxima, junto a sus hijas, Amalia, Alexia y Ariane, aparecen en la Feria, con ellas vestidas de flamencas. Esta sí que es una publicidad, que favorecerá que cientos de holandesas se vistan como una reina. Entre Sevilla y Ámsterdam ya hay vuelos directos.
LA anécdota es conocida. En el Carnaval de Cádiz de 1991, cuando comenzó la primera guerra de Iraq, el cuarteto del Peña y el Masa, ‘Tres notas musicales’, cantó aquel célebre estribillo: “¡Ay, qué casualidad/ ahora una Guerra Mundial/ la gente no respeta/ ni que estamos en Carnaval/ Rian, rian”. Pues eso, que en España tampoco respetan nada. Estamos perdiendo las buenas costumbres. Antes las fiestas navideñas tenían sus rituales y eran como una tregua pacífica que todo el mundo respetaba. El mensaje de Navidad del Rey, y ya está. A los discursos de los presidentes autonómicos no les prestaban atención ni sus familiares. En Andalucía, puede que algún enchufado, para pelotear. Y en esas apareció Meritxell Batet, y la Mesa del Congreso reservó fechas para la investidura de Pedro Sánchez, por si acaso.
LA Navidad en Sevilla siempre fue tranquila y en orden. La gente salía a las calles a ver belenes, que antaño se llamaban nacimientos. Desde que bajó la natalidad perdieron el nombre. Verdaderas multitudes acudían a ver los mappings de la plaza de San Francisco, sobre todo en los tiempos de Zoido. Pero las cosas van cambiando. Estamos perdiendo las buenas costumbres. Antes las fiestas navideñas tenían sus rituales y eran como una tregua pacífica que todo el mundo respetaba. El mensaje de Navidad del Rey y a la misa del gallo. Ahora es al revés, a la misa del gallo y al mensaje del Rey. A los discursos de los presidentes autonómicos no le prestaban atención ni sus familiares. En Andalucía, puede que algún enchufado, para pelotear. Y en esas apareció Meritxell Batet, y la Mesa del Congreso empezó a reservar fechas para la investidura de Pedro Sánchez, por si acaso.