LAS chapucerías del callejero en Cádiz no han empezado ahora, sino que vienen de siglos pasados. La lista de los 40 principales que no tienen calle está encabezada por Alfonso…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
AL ministro de Transportes, Óscar Puente, lo tienen ya en el punto de mira la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Sevilla. Es un ministro peculiar, con una parte buena y otra mala. La buena es que suele decir lo que piensa y miente menos que otros compañeros de…
SUCEDIÓ el día después de la entrega del premio Cervantes. Aquel acto fue presidido por los Reyes, don Felipe y doña Letizia, flanqueados por Pedro Sánchez e Isabel Díaz Ayuso, que no estaban acompañados por sus parejas. El premio fue recibido por Luis Mateo Díez, un gran escritor, de elaborada…
PUEDE ocurrir que la SE-40 y la línea 3 del Metro estén terminadas antes que el centro cultural y de ocio de la Puerta de la Carne. Ese antiguo mercado parece la mansión de los horrores. Es como la comisaría de la Gavidia bis. El edificio es un gafe de los más gafados que se recuerdan. Está así desde el siglo pasado. Siempre que llega un alcalde nuevo dice que lo va a arreglar y cambia el proyecto del anterior. Para no repetirme con las estadísticas y proyectos que se fueron al limbo, recordemos sólo que Juan Espadas lo cambió. Sin embargo, las obras están paralizadas desde antes del verano. El edificio presenta un aspecto cada vez más siniestro. Con visibles síntomas de abandono, cristales rotos, y otros detalles pavorosos. Sólo le falta Frankenstein saludando por alguna ventana.
SEGÚN el Diccionario de la Lengua Española, nepotismo es “desmedida preferencia que algunos dan a sus parientes para las concesiones o empleos públicos”. La palabra deriva del latín, de nepos, que significa sobrino o descendiente. Según la Wikipedia, “el nepotismo es la preferencia que tienen algunos funcionarios públicos para dar empleos a familiares o amigos, sin importar el mérito para ocupar el cargo, sino su lealtad o alianza. Según Murídicas, en países donde se ejerce la meritocracia, el nepotismo es generalmente negativo y se considera corrupción”. Según el sentido común, que un vicepresidente del Gobierno enchufe a su pareja como ministra es escandaloso.
AHORA podrán decir que lo importante para el Cádiz no es la Copa del Rey, sino la Liga. O alegrarse con el consuelo de tontos de que también han eliminado al Getafe (que disputa la Europa League), o a otros clubes de Segunda, como Huesca, Las Palmas, Albacete, Fuenlabrada y Ponferradina, que cayeron ayer. Sin embargo, la forma de perder fue lamentable. Y no sólo por sucumbir en los penaltis, sino porque les empataron una eliminatoria ganada a falta de dos minutos, y porque no fueron capaces de enmendarlo en la prórroga.
LA oposición municipal de Cádiz parece que la ha montado Kichi con algunos fontaneros de Unidas Podemos. Ni a idea le saldría mejor. Decían en la izquierda gaditana que la oposición de los socialistas a Teófila Martínez era de risa, porque tiraban la toalla al ring antes de empezar los combates, y las criaturas iban a los plenos como los mártires al circo de Roma. María de la O, Rafael, Marta… Pasaron por el suplicio, mientras otros compas ejercían el papel de alcaldables de salón. La gente decía: “¡Qué buen alcalde sería Rafael!”, o el que sea, pero se veía más raro que un astronauta de ministro. Después llegó Fran, que también fue inmolado en los tiempos de Kichi. Ahora lo del PP y Ciudadanos es realmente inaudito.
ES pintoresco que en Sevilla (y en Andalucía, en general), se miden los escándalos con doble vara, según quien los protagoniza. ¿Qué dirían si un alto cargo del PP o de Ciudadanos se hubiera construido una ducha de hidromasaje en su despacho y la hubiera ocultado detrás de una estantería? Es cierto que ocurrió en 2006, y que entonces ya hubo cierta polémica, prontamente tapada por los amigos y colegas. Sin embargo, ahora, cuando se ha descubierto la realidad del asunto y sus circunstancias, adquiere unas proporciones de vodevil. Pues se puede entender que exista una ducha en una institución pública, porque el alto cargo es limpito. Pero que la esconda detrás de una estantería, ya es como cuando el marido sorprende al amante dentro del armario. Suena a cosita rara, la verdad.