ANTES se decía “Fulanito vive a cuerpo de rey”, y no era por don Juan Carlos I, que acaba de publicar sus memorias. Sin embargo, ahora (cuando no invitan al…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
ABEL Moreno Gómez es un triunfador. Y eso despierta la admiración en la gente sencilla, y es lo que se quedará para la posteridad. Pero también origina envidia, entre los que intentar regatear méritos. Abel Moreno es una figura de la música popular sevillana, andaluza y española, pero no siempre…
A los pocos días de la catástrofe, escribí que Carlos Mazón debía dimitir como presidente de la Generalitat valenciana. Es lo que pensaban (y siguen pensando) la mayoría de los ciudadanos. Ha sido un error mayúsculo que permaneciera en el cargo, con la excusa de que sería el piloto de…

ESTA polémica que se ha montado sobre la dedicatoria del aeropuerto de Sevilla al glorioso pintor Diego Velázquez nos recuerda a lo que antes se denominaba una serpiente de verano. Estas serpientes no eran como la cobra de Cleopatra, ni siquiera como la que tentó a Eva en el paraíso. Las serpientes de verano ponían de actualidad asuntos baladíes en momentos insípidos. Mayormente cuando la gente se había ido a Matalascañas o Chipiona, incluso a la Costa del Sol, sin necesidad de desescaladas. O a Bali y paraísos lejanos. Para estos últimos casos, era necesario el avión. Había colas en el aeropuerto, que no se preocupaba por el nombre, sino por las salidas y llegadas. Los vuelos de China y EEUU, de los que habló Antonio Muñoz, aún los están buscando.
HOY es 16 de julio y no saldrá la Virgen del Carmen a las calles de Cádiz. A las ocho de la tarde no se abrirán las puertas de su templo, no aparecerá la cruz de guía, no la seguirá el cortejo carmelitano. No la veremos a Ella, en su paso de palio, asomada a la Alameda, para recorrerla en triunfo y bendecir el mar de Cádiz. No podrá seguir hacia la plaza de Mina, que es uno de sus rincones preferidos, donde la esperaban los niños interrumpiendo sus juegos, expectantes junto a sus padres, bajo las luces de un atardecer que declina, las últimas ráfagas de sol que brillan en la corona del Niño. Tampoco seguir, cuando la noche avance, hasta regresar por Veedor y Bendición de Dios, donde la aguardaría el Mentidero para recordarle que es su Reina coronada, y que siempre lo será en el Carmelo de sus corazones.
HOY es el día grande del Julio Carmelitano, que como todas las devociones de Sevilla se ha quedado sin procesiones. Por culpa del coronavirus, naturalmente. Pero no sin cultos. Nunca se quedará la Virgen del Carmen sin el recuerdo y el amor de sus devotos sevillanos, que son muchos. Aún hoy, a pesar de las dificultades de la vida conventual, Sevilla mantiene un pleno carmelitano con cuatro conventos: frailes del Santo Ángel (carmelitas descalzos) y el Buen Suceso (carmelitas calzados) y monjas de Las Teresas (carmelitas descalzas) y Santa Ana (carmelitas calzadas). Por las collaciones históricas de la Magdalena y San Pedro, de Santa Cruz y San Lorenzo, se mantiene viva la huella. Prendió la semilla que en su día dejaron Santa Teresa de Jesús y San Juan de la Cruz, que acudieron a Sevilla a finales del siglo XVI para las fundaciones.
ADEMÁS de inútiles, equivocados y mentirosos, ha resultado que son anticadistas. A esos gachós no les falta un detalle. El doctor Fernando Simón y el ministro Salvador Illa han criticado las celebraciones del ascenso del Cádiz. Hasta ahí normal, porque no sólo han sido criticables, sino motivo suficiente para destituir al subdelegado del Gobierno, José Pacheco, por no montar un plan de prevención eficaz para evitar una concentración tan previsible. Pero se les ha visto el plumero en las palabritas. El ministro Illa dijo: “No me ha gustado nada la celebración del Cádiz”. Y lo de don Simón fue peor, porque dijo: “Si el Zaragoza asciende lo celebraré de otra manera. No me voy a juntar con maños”. Se le ha notado la envidia, como a algunos comentaristas de Vamos y Gol Televisión. Es que esos detalles se notan, tíos. Es mejor ponerse la camiseta de tu equipo.
EL Ministerio de Sanidad, que con tanto esmero dirige Salvador Illa, está ultimando el llamado Plan de respuesta temprana en un escenario de control de la pandemia por Covid-19. Con esa denominación de origen, podemos esperar cualquier cosa. Me gusta lo de respuesta temprana, teniendo en cuenta que la respuesta anterior fue tardía. No había mascarillas, no había tests, no había respiradores, no había vergüenza. No había nada, ni habían preparado nada, ni tenían la más somera idea de que existía una pandemia circulando desde Wuhan a otros lugares del vasto mundo. Ahora quieren reaccionar temprano. No tan temprano. En estos días vemos que están proliferando los rebrotes verdes. Y, según expertos, faltan rastreadores y control; y en los aeropuertos entró, entró, y no se enteró. En Sevilla, desde hoy, es obligatoria la mascarilla.