HEMOS leído en la prensa (o sea, en el Diario) que este verano no van a funcionar los lavapiés ni las duchas en las playas de Cádiz, según ha confirmado…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
SE suele recordar que la Feria de Sevilla fue ideada por un catalán, Narciso Bonaplata, y un vasco, José María Ybarra. Por supuesto, no eran un catalán y un vasco independentistas, ni la Feria ganadera de 1847, con sus 19 casetas en el Prado, era como la de 2024. Sin…
FALTAN siete días para las elecciones en el País Vasco. Los de EH Bildu sueñan con ganar. Sería su primera vez. ¿Pasearán en gabarra? El mejor padrino para botarla sería Pedro Sánchez, que tanto les ha ayudado, hasta el punto de que ya pocos se acuerdan de que son los…
VOLVER al Oratorio de San Felipe Neri es como entrar en el túnel del tiempo. Se le recuerda por aquellas Cortes de Cádiz que aprobaron la Constitución de 1812. Pero yo lo recuerdo como la iglesia del antiguo colegio de San Felipe Neri, los niños en las misas, la Inmaculada de Murillo presidiendo el altar, el humo de los incensarios de los monaguillos, el Pan y el Vino, el padre Vicente confesando, el padre José Antonio riñendo a los fieles, la infancia escapada entre los vericuetos del sueño. Y después, como si saliéramos de un túnel, los actos solemnes de 2012, la conmemoración del Bicentenario, el Rey Juan Carlos, el entonces Príncipe Felipe, los fastos y celebraciones… El tiempo en el que la ciudad recreaba un tiempo, cuando creyó en ella misma. A ese escenario fue ayer Rajoy, en la clausura del 150 aniversario del Diario.
POR supuesto que Sevilla siempre ha sido más partidaria de Velázquez y de Murillo que de El Greco. Sin embargo, a la hora de buscar votos, por encima de todo, como dice el PP (y también Ciudadanos), el alcalde Juan Espadas confía mucho en el éxito de las obras de El Greco. Incluso más que en el Año de Murillo. Atención a estas obras, que comenzaron esta semana, y que el propio alcalde ha calificado como “una de las más emblemáticas de mi mandato”. La oposición cree que más bien debió decir “una de las pocas de mi mandato”. Sin embargo, es lo que hay. Tienen una duración estimada en 10 meses, lo que significa que serán inauguradas precisamente en marzo de 2019, en plena Cuaresma, dos meses antes de las elecciones municipales.
TODOS los partidos han condenado las pintadas en la casa de Ignacio Romaní, concejal del PP en Cádiz. Sin embargo, no estamos ante una golfada de especial gravedad, sino ante un episodio más de lo que ocurre en Cádiz de vez en cuando. No es el primer político, ni el primer militante, ni siquiera el primer periodista, ni cualquiera al que insultan o amenazan algunos asilvestrados que no comparten sus ideas. El problema no está en la pintura, sino en el cerebro del pintor. Y en la hipocresía que circula por esta ciudad, donde se habla mucho de liberalismo y se practica poco. Pues ser liberal, en primer lugar, obliga a respetar a los demás, empezando por quienes piensan diferente.
PARECÍA como una tormenta de primavera en un vaso de agua. Las fechas de la Feria del año 2019 ya estaban dando que hablar demasiado. En el Ayuntamiento no han optado por otra consulta participativa telemática, ya está bien, sino por solucionarlo al modo jerárquico: esto es lo que hay. La Feria empieza y termina en mayo, del 4 al 11, con sus dos semanas pascuales por medio. Si no empieza en abril, la culpa no la tienen Juan Espadas ni Juan Carlos Cabrera, sino el calendario litúrgico, que llega tardío, con un Miércoles de Ceniza el 6 de marzo, con un Domingo de Ramos el 14 de abril. Pero, tras el trabajito que les ha costado implantar la Feria larga y el miércoles festivo, y con el éxito autoproclamado y con el récord del Metro, no la van a aligerar así por las buenas.
LA decisión de presentarse unidos o desunidos a las elecciones municipales del próximo año en Cádiz no la van a tomar Martín Vila ni las bases de IU. Será decidido en Madrid. El sábado se reunirá la Asamblea de Izquierda Unida, en la que Alberto Garzón expondrá su hoja de ruta. Tanto él como Pablo Iglesias están de acuerdo para que Podemos e IU se presenten conjuntamente, con una lista única, a las elecciones autonómicas y municipales de 2019. Está por ver de qué forma visten el muñeco para que no parezca lo que realmente es: IU ha echado al histórico comunismo español del PCE en los brazos de un político adanista llamado Pablo Iglesias, convencido de que fue el creador del mundo de los indignados y la nueva política.