LA vida es como un carnaval, o quizás esa confusión proceda de que el carnaval se nutre de la vida misma. En Cádiz existe la costumbre de mezclar la vida…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
AL poco tiempo de las elecciones en la Hermandad de los Estudiantes, llegaron las de la Universidad. En Sevilla se dice Universidad, y se sabe a la que nos referimos, porque era la de toda la vida, antes de que se ampliara la oferta educativa. Establecer comparaciones entre las elecciones…
LES quedará el consuelo de que peor que ahora no van a estar, cuando se vote. El congreso del PP andaluz les ha llegado en su momento más difícil de la legislatura. Juanma Moreno se equivocó, al pecar de un exceso de confianza con la sanidad andaluza. En décadas pasadas,…

EL debate sobre el estado de la ciudad pasará a la historia por el arboricidio del verano. Los de Participa (o sea, Podemos) no respetan al alcalde en la misma medida que Pablo Iglesias a Pedro Sánchez. De modo que lo han rebautizado como Juan Serrucho, por su prodigalidad para talar árboles a destajo (hasta la semana pasada a eso se llamaba apear, pero ya no), y ahí están, enviando manifestantes con sus pancartas a la Plaza Nueva. La cosa tiene su gracia, aunque al alcalde le ha parecido “una tontería política”. También es injusto, ya que están reponiendo para compensar, y no se ha oído hablar de Juan Carlos Pala ni de Antonio el Sembrador. A pesar de que Cabrera y Muñoz han plantado por diversos barrios del hábitat urbano sevillano. Y al concejal de Parques y Jardines, David Guevara, le piden la cabeza, como si estuviera ahí para cortar por lo sano.
EN Riad, capital de Arabia Saudí, las cosas de palacio van despacio. En eso se parecen a Cádiz. Por fin, el príncipe heredero, Mohammed Bin Salman Bin Abdulaziz Al-Saud, ha firmado el contrato que pactaron el pasado mes de abril en Madrid. Un contrato conseguido gracias a la mediación del rey Felipe VI y su padre Juan Carlos, cuando todavía era presidente del Gobierno Mariano Rajoy. Precisamente la entonces ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, fue la que intercambió el acuerdo de intenciones. El contrato es famoso, porque aportará una inversión de 1.880 millones de euros y facilitará cinco años de carga de trabajo en el astillero de Navantia en San Fernando, con 6.000 empleos directos e indirectos.
SE podría decir que el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, tiene una flor como la que cultivaba con éxito Johan Cruyff. Todo le sale bien. A diferencia de quienes parecen gafes, es lo contrario: un talismán. Entre sus mejores especialidades están los premios y congresos. Todos vienen a parar a Sevilla. Ha conseguido los Goya (que tienen premio por partida doble), pero también los premios de Cine Europeo, y los Max, y los Forqué, y los Ondas, y cualquier cosa que se le ocurra, donde haya faranduleo y lucimiento mediático. En los Goya tiene el glamour garantizado el próximo febrero, a un trimestre de las elecciones municipales. Y sin problemas: los indignados estarán callados, ya que es una fiesta de su agrado.
HA pasado por Cádiz Soraya Sáenz de Santamaría, dentro de la campaña que han organizado los del PP contra los del PP. Fue agasajada en el Hotel Atlántico por la plana mayor, que la apoya incondicionalmente. Y ha sido muy comentado el regalo que recibió: una camiseta del Cádiz CF, con la inscripción de su lema de campaña: SoraYA! y el número 1. Se la entregaron entre Juancho Ortiz y Antonio Sanz, mientras Teófila Martínez y otros militantes aplaudían. A unos les ha parecido bien, a otros les ha parecido mal, y a mí me ha parecido arriesgado.
ALGUNOS activistas tratan a los árboles peligrosos como si fueran las víctimas de un desahucio. Será por la costumbre, o porque participan los mismos. Cualquier día podríamos ver indignados de Podemos y Unidos encadenados a un plátano o una palmera. Yo no sé si se puede podar mejor, o no. También ignoro si algunos de los árboles enfermos se pueden ahorrar la eutanasia. Ha sido polémico lo que ocurrió el lunes en la avenida de Cádiz, donde llegó el director de Parques y Jardines, Adolfo Fernández, como si fuera el juez de guardia, para decir que no apearían 16 de los 18 árboles que iban a desahuciar. Conste que esto es más difícil de lo que parece. Espadas no es un desalmado, sino que a veces los árboles se caen como si sufrieran lipotimias. El calor les sienta fatal.