ANTES se decía “Fulanito vive a cuerpo de rey”, y no era por don Juan Carlos I, que acaba de publicar sus memorias. Sin embargo, ahora (cuando no invitan al…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
ABEL Moreno Gómez es un triunfador. Y eso despierta la admiración en la gente sencilla, y es lo que se quedará para la posteridad. Pero también origina envidia, entre los que intentar regatear méritos. Abel Moreno es una figura de la música popular sevillana, andaluza y española, pero no siempre…
LES quedará el consuelo de que peor que ahora no van a estar, cuando se vote. El congreso del PP andaluz les ha llegado en su momento más difícil de la legislatura. Juanma Moreno se equivocó, al pecar de un exceso de confianza con la sanidad andaluza. En décadas pasadas,…

A estas alturas, nadie puede dudar de la importancia estratégica que tiene la autovía de la SE-40 para Sevilla. En el tramo entre Dos Hermanas y Alcalá de Guadaíra continúan las obras, con una ejecución del 90%, según se ha publicado. Es un tramo importante, que enlazará el sur y el este de la provincia de Sevilla, entre dos núcleos urbanos muy poblados del área metropolitana. Es también un enlace entre la A-92 (la autovía que conecta a Sevilla con Andalucía oriental) y la AP-4 (la autopista que lleva hacia Cádiz, hacia el sur de esta parte de Europa y el norte de África). Pero la SE-40 también está destinada a facilitar la conexión entre el sur y el oeste; es decir, hacia Huelva y Portugal. Y ahí es donde nos encontramos con el problema de los túneles. Si no completan el enlace, la SE-40 será una autovía interrupta. O lo que es igual: un desperdicio de millones.
CÁDIZ es una ciudad bipolar, que todavía no ha encontrado su identidad propia en la zona de Extramuros. Decíamos ayer que en el conjunto histórico del casco antiguo hay que salvar el sky line, hay que preservar lo que se ve desde la Torre Tavira, donde está la Cámara Oscura de Belén González Dorao. Y, por supuesto, hay que salvar las torres miradores. En cualquier ciudad (no tan abandonada a su suerte y su desgracia) existiría un Plan para las Torres Miradores. Igual que se deben salvar los castillos, los baluartes y las murallas, donde no saben qué hacer, mientras destinan una parte de las bóvedas de San Roque para locales de distracción juvenil, en las medidas antibotellón. Pero, junto a eso, está Extramuros, donde tampoco saben qué hacer.
ES otro ejemplo del catetismo que nos invade cuando se habla de los aeropuertos y el turismo. Hubo un tiempo en que les dio la ventolera por los chinos. Fue cuando Juan Espadas envió un mensaje que se proyectó en la pequinesa plaza de Tiananmen, y cuando Antonio Muñoz se desvivía con los chinos, a los que ofrecieron varios edificios históricos de esos que están abandonados en Sevilla y no saben qué hacer con ellos. También se habló de una supuesta conexión aérea directa con China desde el aeropuerto de San Pablo. Pero ahora la moda se deriva a los EEUU, a pesar de que ya no lo preside Barack Obama, sino Donald Trump, ese monstruo. El turismo norteamericano es el campeón del lujo en Sevilla. Varios de los nuevos hoteles de cinco y cuatro estrellas están auspiciados por empresas de capital yanqui. Nada mejor que conseguir la conexión con Nueva York.
OTRA catetada. Me refiero a la presentación de la hamburguesería gourmet de la calle Novena, esquina a San Miguel. Para empezar, no es una novedad. Hay 28 en España. Cualquiera que haya viajado las ha visto y ha comido allí, en Madrid, Sevilla o Málaga, entre otras ciudades. Para seguir, dijeron que se instala en el local de Zara Home, que cerró. ¡Vaya por Dios! Ni que ese local lo hubiera construido Amancio Ortega. ¿Ustedes sois de Cádiz o de A Coruña? En esa misma esquina de la calle San Miguel y Novena estuvo la pastelería Viena. En su salón me organizaron el desayuno de la primera comunión, y tengo una foto donde se me ve leyendo un Diario de Cádiz en formato sábana, una premonición. Todavía no existía Zara Home, pero sí la calle Novena (entonces Eduardo Dato) y la calle San Miguel (entonces San Miguel). Y los pasteles de Viena, que fue la mejor confitería de Cádiz, junto a La Camelia del esplendor.
LA evolución de la Avenida de la Constitución es obvia: estamos en el tiempo de los hoteles. A pesar de la competencia de las viviendas turísticas, no paran. Los inversores que compraron los principales edificios han negociado con cadenas hoteleras. Así el antiguo Banco de Andalucía, una vez que culminen las obras en curso, acogerá un hotel Autograph de la cadena AC by Marriot. Mientras que el edificio del antiguo Banco Urquijo, que fue adquirido por la familia García Baquero como inversión, acogerá otro hotel de Soho Boutique. La firma francesa FNAC tenía una flagship allí desde mayo de 2007, pero se mudó a un córner del centro comercial Torre Sevilla, de más modestas pretensiones.