ANTES se decía “Fulanito vive a cuerpo de rey”, y no era por don Juan Carlos I, que acaba de publicar sus memorias. Sin embargo, ahora (cuando no invitan al…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
ABEL Moreno Gómez es un triunfador. Y eso despierta la admiración en la gente sencilla, y es lo que se quedará para la posteridad. Pero también origina envidia, entre los que intentar regatear méritos. Abel Moreno es una figura de la música popular sevillana, andaluza y española, pero no siempre…
A los pocos días de la catástrofe, escribí que Carlos Mazón debía dimitir como presidente de la Generalitat valenciana. Es lo que pensaban (y siguen pensando) la mayoría de los ciudadanos. Ha sido un error mayúsculo que permaneciera en el cargo, con la excusa de que sería el piloto de…

HOY es Viernes Santo, el día en que se conmemora la muerte de Cristo en la cruz. Se entienden mejor las terribles consecuencias del coronavirus. Hasta ayer han fallecido 15.238 personas en España, 652 en Andalucía y 141 en Sevilla. Entre esa larga lista de víctimas parece que faltan muchos más, que han muerto en residencias de mayores, sin que se haya podido acreditar que la causa fue el coronavirus, por la falta de test. La mayor vulnerabilidad está castigando a los más débiles, a esas personas a las que se llamaba ancianos o incluso viejos (en Sevilla hay una céntrica calle Viejos, un nombre que proviene del antiguo hospital); es decir, los mayores de 85 años, que están cayendo por decenas en muchas residencias.
l En un recorrido simbólico nos acercamos a siete templos de Sevilla con sus monumentos eucarísticos l Este año las mantillas y las túnicas se quedarán en el armario de la memoria
HA llegado el Jueves Santo, que es el día del Amor Fraterno, y hoy representa la cumbre de la pérdida. No se podía llegar más alto para vernos tan abajo con la nostalgia de lo que no viviremos, pero también con los recuerdos de lo que vivimos. Mantillas y peinas que se quedarán guardadas en los armarios del tiempo. Túnicas de nazareno que ninguna mano planchó, en las que aún se percibe algún resto de cera como si se hubiera secado la lágrima de un cirio. Madrugada tan larga, tan demasiado larga, que se acortará entre un eco lejano de Esperanzas.
Hoy no salimos para asistir a los Santos Oficios, a la Mesa de la Cena del Señor, ni habrá procesiones claustrales para trasladar al Santísimo a los Sagrarios. Pero vamos a visitar los monumentos que permanecen alzados en la memoria, como reflejos de otros años en los que Sevilla conmemoraba la plenitud del Jueves Santo con la grandeza de una Roma andaluza. Por calles y plazas que hoy estarán vacías, con el sol de la tarde avanzando por el camino más corto, entre murmullos que nos devuelven al tiempo que se nos ha escapado como un chorro de agua entre las manos.
AUNQUE esta historia sea conocida, resulta oportuno volver a contarla, porque a veces se olvida, y hay muy poca memoria histórica; o será que los recuerdos se esparcen a conveniencia. No se puede entender lo que es hoy la cofradía del Nazareno de Santa María sin la aportación de José María Pemán, que fue su hermano mayor. Ni mucho menos sin lo que hizo para crear de la nada a la Virgen de los Dolores, que había sido destruida. En el origen de la Virgen de los Dolores de Santa María está José María Pemán, está Juan Luis Vassallo, está Antonio Accame, está Gitanilla del Carmelo… Es decir, están Cádiz, los gaditanos y sus sentimientos. Pero, por encima de todo, Pemán.
TIENE guasa que en este Jueves Santo, en Sevilla, esté todo el mundo pendiente del coronavirus. Pero ¿qué le vamos a hacer? Ahora la discusión se centra en si hay más muertos o menos, cuando en las cifras oficiales ya vamos por 14.555 en España. En esta pandemia, el mayor problema es que la ignorancia está en el poder. No supieron qué hacer, adoptaron decisiones equivocadas y siguen dando palos de ciegos. Ayer, la directora adjunta de Emergencias, María José Sierra, dijo que no sabe si las medidas se levantarán en unas autonomías antes que en otras. O en plan de todos por igual, valientes, a ésta es. El Gobierno hizo un seguidismo de varios errores gordos de la Organización Mundial de la Salud, en vez de apostar por auténticos expertos y fijarse en China, que va dos meses y medio por delante en el coronavirus.
l La historia está vinculada a Al Mutamid y San Fernando, a las fundiciones, los toreros y la Artillería l Hoy el Cristo de la Salud y la Virgen del Refugio mantienen el espíritu del barrio
POR razones que se me escapan, el arrabal de San Bernardo no ha tenido tan buena literatura como otros barrios de Sevilla. Quizá porque sus vecinos, durante siglos pasados, eran gente modesta, y porque la fama legendaria no se centró en la historia del barrio, sino en las fábricas de fundición, en la Artillería, y sobre todo en los toreros, vinculados también a la hermandad, desde Curro Cúchares, Costillares y El Tato a Pepe Luis y Manolo Vázquez.
San Bernardo fue muy importante desde el tiempo de los moros, cuando era el arrabal de Ben Ahofar. La Buhaira tomó su nombre de una laguna que existió por allí, y en sus proximidades construyó Al Mutamid un palacio con jardines. San Bernardo fue importante también para los cristianos desde que llegó el Santo Rey y acampó en las cercanías para iniciar la reconquista de la ciudad. Está reflejado en los nombres de algunas calles, como Campamento, o las que evocan los milagros de Tentudía y Valme, o las devociones de Portacoeli.